La Messimanía no conoce frenos, y los fanáticos intentan acceder al ídolo argentino por todos los medios posibles para sacarle autógrafos y selfies. Es ahí donde entra en funciones la figura de su guardaespaldas personal, Yassine, un experto en artes marciales que sigue al '10' a todas partes... incluido el campo de juego.
Si no se ha fijado todavía en los partidos del Inter de Miami, lo puede comprobar en las imágenes. Fornido, rapado y con barba, el hombre contratado por el equipo impide que los seguidores de Messi lo toquen o lleguen hasta él cuando invaden el terreno, e inclusive se le ve muy atento durante las entradas al estadio, las celebraciones de gol o las charlas post-partido con los adversarios.
Algunos han definido a Yassine como "una versión de Rodrigo de Paul", quien se ganó la justa fama de guardaespaldas del rosarino debido a sus afanes de proteger al capitán de la albiceleste. Y verdaderamente es increíble verlo correr junto al '10' por toda la línea de banda, como si fuera un juez de línea.
Nadie lo dude: a Messi jamás le hicieron una marca personal tan exigente.
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