Un joven cubano fue asesinado a puñaladas el sábado en el agromercado donde trabajaba en el barrio Colón, en Centro Habana.
La víctima se nombraba Osmell Ramos, nacido en Guantánamo hace 35 años y padre de un niño.
El reportero de sucesos Niover Licea, que se identifica en redes como "Nio reportando un crimen", relató en Instagram que el asesino, al parecer otro guantanamero, es un hombre con quién Osmell tuvo problemas antes y que fue a buscarlo a su trabajo. En este momento está prófugo.
"Todo parece indicar que fue un ajuste de cuentas", señaló el reportero.
Niover compartió un audio en el que un joven da detalles del crimen.
"Él estaba trabajando solo en el agro y el tipo fue, parece que fue a comprar, y lo vio y le dio una puñalada en el estómago. Lo cazó, primero lo cazó a ver si estaba solo, se dio cuenta de que estaba solo y ya", precisó.
De acuerdo con el testimonio, el fallecido logró esquivar esa primera puñalada y al parecer forcejeó con el agresor, pero este le propinó una segunda puñalada en el pulmón que le causó una neumotórax.
"Él era asmático y no lo pudo pasar", agregó la fuente.
La activista política Glenda Rancaño lamentó la muerte del joven, quien residía en su barrio, y acusó al gobierno por no hacer nada ante el aumento de delitos y hechos violentos en Cuba.
"Un muchacho buenísimo y super joven. Presidencia de Cuba, han acabado con mi país, lo han convertido en un maldito cementerio de personas asesinadas y desaparecidas todos los días", afirmó en su cuenta de Twitter.
"Dos puñaladas, una en el estómago, otra en el pulmón... lo reventaron. Un niño que no era de ambiente ni de guapería, super luchador", recalcó.
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