Un fin de año negro es lo que se les viene encima a los cubanos, y no solo por los apagones, sino por la falta de combustible que obliga a la población a hacer colas de hasta seis cuadras para poder comprar.
En La Habana, los conductores permanecen de cinco a seis días en enormes colas con la esperanza de adquirir gasolina, según denuncian varias publicaciones en redes sociales.
El usuario Alejandro Rodríguez Díaz compartió en su muro de Facebook fotos del CUPET Alameda, en Santa Catalina, municipio 10 de octubre, donde lleva en la fila desde el domingo, "mañana, tarde, noche y madrugada".
"Hemos estado también en espera de alguna información oficial por parte de CUPET o el gobierno municipal, o la Virgen María. Esta realidad de no informar, es la que más irrita. ¿Cuán difícil es que algún funcionario del gobierno (a dos cuadras del CUPET), se acerque y converse con nosotros. ¿Cuán difícil es informar de una posible PROGRAMACIÓN de abastecimiento por CUPET?", cuestionó.
Por su parte, el internauta Armando Caos difundió un video de la cola para la gasolina en el CUPET de 112 y 5ta avenida, en el municipio Playa, "donde más huevones viven".
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"Son más de seis cuadras de autos por ambas sendas y muchos dicen que llevan hasta tres y cuatro días en esa cola, pero no importa, avanza y eso nos duele", ironizó.
Yudi Ramos, residente en El Vedado, también criticó la falta de respeto y la desinformación.
"Los CUPET llevan una semana de colas interminables y ni sombra de combustible. Ni el NTV, ni el Estado, ni el ministro de Energía ofrecen una información", subrayó.
Johanna Jolá Álvarez, líder de la iniciativa solidaria Huellas, señaló que los problemas no solo se reducen a tener que pasar tres, cuatro y cinco días en colas para poder echar combustible.
"Colas infernales para el gas de balita. Se ha desaparecido hasta el pollo tras la última Resolución implementada para hacer el cierre de 2024 aún más infernal. Menudo fin de año más triste estamos viviendo como pueblo", dijo en Facebook.
Un lector de CiberCuba escribió a esta redacción mostrando su indignación con la situación de miles de choferes jóvenes y otros de la tercera edad que son taxistas o trasladan enfermos que necesitan hemodiálisis.
"Es injusto que hombres con más de 40 años de trabajo lleven 24 horas en una cola de gasolina en el CUPET de Zapata para abastecer un carro del Estado que se dedica a trasladar enfermos porque el CUPET que tienen asignado no tiene combustible. Es un crimen que esos choferes estén 24 horas para cumplir con su trabajo, algo casi imposible debido a la crisis. Entonces es muy injusto que recaiga la responsabilidad sobre esos choferes. Eso es responsabilidad de la empresa y del gobierno", apuntó.
Los choferes han bautizado como "La cola seca" las interminables filas en gasolineras sin combustible mientras esperan a que llegue una pipa cargada.
Pero el problema no son solo las colas interminables sino, además, los altos precios. El pasado domingo 9 de diciembre, un activista denunció en redes sociales que el precio de la gasolina ha subido en el mercado informal, alcanzando cifras exorbitantes, hasta los 700 CUP por litro. Todo apunta a que seguirá escalando hasta situarse en los 1,000 pesos por litro, como ocurrió durante el apagón masivo de octubre.
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