El presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, reveló este lunes que mantuvo su primera conversación telefónica con el Papa León XIV, a quien agradeció su apoyo a la causa ucraniana y extendió una invitación oficial para realizar una visita apostólica a Kiev.
El diálogo entre ambos líderes marca un hito simbólico en la relación entre el Vaticano y el gobierno ucraniano, en plena guerra tras la invasión rusa iniciada en 2022.
Lo más leído hoy:
La conversación, calificada como “muy cálida y realmente sustanciosa” por el mandatario ucraniano, fue confirmada por la Santa Sede a través del director de su Oficina de Prensa, Matteo Bruni, acorde a Vatican News.
Durante el intercambio, Zelenski agradeció al recién elegido pontífice “su apoyo a Ucrania y a todo nuestro pueblo”, así como sus recientes declaraciones sobre la urgencia de alcanzar una “paz justa y duradera” y de lograr la liberación de prisioneros de guerra.
Uno de los puntos destacados de la conversación fue la solicitud de colaboración del Vaticano para repatriar a los miles de niños ucranianos deportados por Rusia. Según explicó Zelenski, esta tarea continúa en manos del cardenal italiano Matteo Zuppi, a quien el Papa Francisco había confiado la misión antes del cónclave. León XIV ha decidido mantener en funciones a toda la Curia, por lo que Zuppi continúa su labor humanitaria.
Además, el presidente ucraniano informó al pontífice sobre el nuevo acuerdo alcanzado con sus aliados occidentales, que contempla un alto el fuego total e incondicional durante al menos 30 días. “Ucrania desea poner fin a esta guerra y está haciendo todo lo posible para lograrlo. Ahora esperamos medidas similares por parte de Rusia”, afirmó Zelenski.
Finalmente, el mandatario reiteró su deseo de recibir al líder de la Iglesia católica en una visita oficial: “Una visita así traería verdadera esperanza a todos los creyentes y a todo nuestro pueblo”. Ambos acordaron mantener contacto directo y preparar un encuentro en persona “en un futuro cercano”.
León XIV y su firme oposición a la invasión rusa
Aunque apenas ha comenzado su pontificado, León XIV —nombre papal adoptado por el cardenal Robert Prevost tras el reciente cónclave— ya ha manifestado públicamente una postura clara y crítica sobre la guerra en Ucrania.
En un video compartido en redes sociales antes de ser elegido Papa, Prevost condenó sin ambigüedades la agresión rusa, a la que calificó de “auténtica invasión imperialista”.
“Rusia quiere conquistar un territorio por motivos de poder y ventaja propia”, afirmó entonces el futuro pontífice, al destacar la importancia estratégica, histórica y cultural de Ucrania. También denunció los crímenes contra la humanidad cometidos en el marco del conflicto: “Ya está comprobado, se están cometiendo crímenes en contra de la humanidad en Ucrania”.
Prevost insistió en la necesidad de orar por la paz, pero también de hablar con claridad: “Algunos políticos no quieren reconocer los horrores de esta guerra ni la maldad que Rusia está realizando en Ucrania”.
Estas palabras han sido interpretadas por observadores internacionales como un giro respecto al tono más diplomático y prudente de su predecesor, Francisco. La firmeza moral de León XIV en torno a la agresión rusa parece alinear su liderazgo con la causa de la justicia internacional y los principios del derecho humanitario.
Si el Papa accede a visitar Ucrania en plena guerra, marcaría un precedente histórico en la diplomacia vaticana. La invitación de Zelenski, en un momento crítico del conflicto, podría abrir una nueva etapa de presencia activa del Vaticano en el terreno político y humanitario del Este europeo.
Archivado en: