¿Cómo se reconoce a un cubano?

(Yani Gil). CiberCuba se ha desplazado hasta el corazón de la ciudad de Hialeah para saber a pie de calle cómo se identifica a un cubano. Y una vez que se sabe que esa persona nació en Cuba, ¿se puede saber la provincia de procendencia? Habaneros, matanceros o camagüeyanos, todos tiene ese algo que les diferencia: un toque diferente. Pero todos coinciden en señalar la alegría y la solidaridad como lo que les hace diferentes y especiales.

Nuestra primera entrevistada parece cubana, pero no lo es. Es hija de cubanos y nació en Nueva Jersey. Ella tiene claro cómo son los isleños: "Radio guarachita internacional, cómo les gusta hablar y bailar".

La segunda encuestada tiene claro que lo que identifica a un habanero es su forma de hablar. "No decimos la ese, decimos: 'Vamos pa' allá, vamos pa' acá'. La gente de Oriente dice: 'Vamos para allá, vamos para acá'. Tienen el color más tostadito. Las orientales tienen el pelo más bonito. Ya por la ropa y la forma de vestir también lo sabes". Si no hubiera nacido en La Habana, a ella le habría gustado nacer en Matanzas, al ciudad más linda que hay en Cuba. Está casada con un matancero y los reconoce a distancia: "Tienen un color muy lindo. Así, blanquito y con el pelo castañito".

Sin embargo, no siempre se reconoce a los habaneros por su forma de hablar sino también por su educación. "Son chabacanes. Hablamos así, medio regaíto". De los orientales y los pinareños tampoco tiene una mejor opinión, aunque en general destaca que el cubano es "muy bueno y muy solidario".

No es la única persona que identifica a los cubanos por su chabacanería. "Soy cubana, guajira y a mucha honra. Soy de Sancti Spíritus y allí somos muy nobles. Nos gusta ayudar a las personas. Así somos todos los cubanos. Llegan a una cola y dicen: "Oye, ¿ésta es la cola del pan?"

Miguel, otro encuestado, identifica a los cubanos por el deje. "Los orientales hablamos casi como los dominicanos. Los habaneros hablan casi cantando. Cada provincia tiene su forma de hablar". Sin embargo, lo que ayuda a saber si alguien es pinareño no es la forma de articular las palabras sino la leyenda urbana que dice que dejaron una concretera dentro de un cine recién construido.

También hay quien considera que el cubano es "igual que otro cualquiera", pero un camagüeyano distinguiría a un compatriota suyo "porque les gusta comer y vestir bien y le gusta el 'vacilón'".

Otra de las cosas que identifican a un cubano, según otra entrevistada de Sancti Spíritus, es que cuando van a pedir algo dicen: "Oye, asere, qué volá. Llegó el picadillo de soya, llegó el pan, pero huevo no hay".

Para los más jóvenes, los que han llegado a Miami con tres años, un cubano se identifica cuando sacan el café y se lo dan al barrio o empiezan la fiesta desde por la mañana con puerco asado.

Los hay que se sinceran y confiesan lo que todo el mundo sabe, que los cubanos usan mucho las manos a la hora de comunicarse y hablan alto."Los identifico por todo. La cara, la ropa: 'short' corto con guayabera y que dicen; 'Qué vuelta, qué vola'".

La forma de caminar es otra de las claves para identificar a un cubano."Somos los mejores caminando". Además, un cubano se diferencia de un chino en que los asiáticos son los que más juegan al billar o apuestan en una pelea de gallos: "Se juega hasta la mujer". En el lado contrario de la balanza está el cubano, que es el que más come. "Come comida y come postre. Es el más gastador", dice el dependiente de una cafetería en Hialeah.