La nueva terminal de ómnibus de Sancti Spiritus debe quedar terminada en junio, cinco años después de que se hicieran las primeras acciones constructivas.
Según el periódico Escambray, la instalación será la más moderna de su tipo en el país, y estará ubicada en la intersección de la Carretera Central y la calle Isabel María de Valdivia. Su ubicación en un lugar céntrico facilitará la conexión con la red de ómnibus urbanos desde cualquier parte de la ciudad, y con los automóviles que vienen de otras provincias.
Anunciaron su inauguración para 2017. A finales del año pasado, los responsables de la obra dijeron que estaría en marzo de este año y luego explicaron que abriría en junio.
Según un artículo publicado por la prensa local en enero pasado, había problemas con la mano de obra y los materiales de importación. No obstante, aseguran que el 80 % de la obra ya está lista.
En las imágenes aun es difícil ver tales avances pero las autoridades locales insisten en que sí, y esta semana anunciaron los detalles de la nueva terminal.
La edificación contará con un patio interior con 16 andenes, por donde deberán pasar unas 130 guaguas diariamente. Y es que la provincia es un lugar de parada obligada, conocida como toma de hora, para las Yutong que viajan de un extremo a otro del país.
Pedro Francisco Pérez, inversionista de la Unidad Empresarial de Base Ómnibus Nacionales en la provincia, reveló que el costo supera los tres millones de pesos.
“La edificación tendrá incluidos los puntos de Correos de Cuba, la Empresa del Libro, una sala de navegación y WiFi, así como servicios personalizados (peluquería-barbería), cafeterías y restaurantes, y un área de venta de las Tiendas Recaudadoras de Divisa”, dijo.
“Igualmente, dispondrá de una piquera de taxis, una sala de lactancia materna y un cuarto para la custodia de equipaje, donde el viajero podrá dejar los bultos por espacio de 24 horas”, añadió.
La obra, que tiene un área total de 6 600 metros, cuenta con dos plantas. En la primera, además de los locales de servicios, estarán los tres salones principales: el de la lista de espera, con capacidad para 120 personas, el de las reservas de última hora, donde cabrán 100 pasajeros, y el de Vía Azul, con 50 asientos; estos dos últimos estarán climatizados.
En ese piso habrá también un puesto médico, los baños, y un local para el control de tráfico y taquilleros.
La segunda planta contará con un área para la PNR, un dormitorio de tránsito para choferes, oficinas y un salón de reuniones.
El diseño ha incluido que la vista hacia el andén desde las salas de espera esté revestida por cristales inclinados, semejantes a los aeropuertos. El equipamiento informático es de última generación, con una pizarra telefónica con más de 30 extensiones, y circuito cerrado de televisión.
Para Miguel Castro Piña, director de la Unidad Empresarial de Base Ómnibus Nacionales en el territorio, la mejoría no solo será en imagen y confort, sino también en la estructura, pues el local tendrá tres entradas para el público, incluida una para minusválidos.
Solo queda esperar que los espirituanos tengan más suerte con su terminal de ómnibus que con otras obras recién levantadas. El pasado 11 de febrero CiberCuba publicó el caso del Coppelia de esa provincia, que luego de una reparación capital que demoró tres meses y costó 280 000 pesos, fue reinaugurada y solo un año después, tuvo que ser cerrada parcialmente para reparar errores en su construcción.
¿Qué opinas?
COMENTARArchivado en: