Alcibíades Hidalgo, exjefe de despacho de Raúl Castro, afirma que el cambio de presidencia supondrá en Cuba “un cambio real, aunque diríamos que no de las proporciones o la profundidad en que se ha presentado”.
En declaraciones a TV Martí, Hidalgo (72 años) aseguró que Raúl Castro seguramente cederá una parte de su poder a su sucesor y que los dirigentes históricos de la Revolución deberán hacer un trato con Díaz-Canel.
Interrogado sobre la composición de la estructura de mando, Hidalgo respondió que “el control del país está absolutamente en manos del Partido (Partido Comunista de Cuba), el verdadero órgano de dirección del país es el Buró Político del Partido y no el Consejo de Estado, que es simplemente un instrumento auxiliar del poder político”.
Y añadió: “Díaz-Canel va a cargar con la responsabilidad del funcionamiento del Estado y del gobierno, va a ser la figura representativa y va a tener la oportunidad, si todo marcha como es previsto, el verdadero poder cuando ya Raúl Castro no esté en el juego”.
Considera, igualmente, que a partir de ahora se tomará en Cuba como variante dividir en varias personas los cargos que hasta ahora ostentó Fidel Castro en solitario durante varias décadas.
Sobre el tema de “los octogenarios” o figuras históricas de la Revolución cubana, entre los que figuran José Ramón Machado Ventura y Ramiro Valdés, Hidalgo ha destacado que “Los octogenarios tienen que pactar con quien intente suceder a Raúl, por un problema de supervivencia".
Alcibíades Hidalgo, además de Jefe de Despacho del entonces General de Ejército Raúl Castro, luego fue Embajador de Cuba ante la ONU, cargo del que fue destituido en 1993. Hidalgo huyó de Cuba y llegó a Miami en julio del 2002.
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