Expertos en el tema Cuba, que trabajan en la Oficina de Washington para Latinoamérica (WOLA) no consideran que el próximo presidente de Cuba hará un cambio “dramático e inmediato” en el país.
"No debemos esperar cambios dramáticos en la escena inmediata", explicó Marguerite Jiménez, directora de WOLA para Cuba, durante una conferencia telefónica con la agencia Efe.
No obstante, dieron pistas de cómo creen ellos que actuará el nuevo mandatario, que se supone sea Miguel Díaz-Canel, el primer presidente en décadas sin el apellido Castro.
Jiménez precisó que aunque no es previsible que dé un giro brusco en la dirección del país, sí que tendrá que acometer reformas importantes en materia económica y social durante los próximos años.
Para Geoff Thale, vicepresidente de WOLA, “este deberá hacer frente especialmente a las expectativas de los más jóvenes en distintos ámbitos, sobre todo en el acceso a la información y a internet”.
Asimismo aclararon que para cualquiera de las modificaciones que intente hacer en materia económica, deberá enfrentar la nueva política de la administración Trump hacia Cuba.
Tendrá que trabajar en un contexto de creciente hostilidad con Estados Unidos, según Jiménez, quien igualmente considera “que la mejora de la economía será un elemento clave”.
"Desafortunadamente, el actual clima es de hostilidad", dijo Thale.
Este miércoles el Palacio de Convenciones de La Habana acojerá desde las 9.00 de la mañana la IX Legislatura y la constitución de la Asamblea Nacional del Poder Popular, en una sesión de dos días en los que se designará al Consejo de Estado y a un nuevo presidente.
Raúl Castro dejará la presidencia a los 86 años pero continuará hasta 2021 al frente del único partido legal en la Isla que controla el poder. Además, y sin fecha límite anunciada, seguirá al mando del Ejército.
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