El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, celebró este lunes el fallo con el que el Tribunal Supremo de ese país dio la razón a un pastelero que alegó motivos religiosos para no prestar sus servicios a una pareja homosexual.
“¡Gran fallo del Tribunal Supremo para el pastelero!”, escribió Trump en Twitter, después de conocer que el ente judicial falló por una mayoría de 7 a 2 a favor del repostero Jack Phillips de Colorado que en 2012 se negó a preparar un pastel nupcial para una boda gay.
El Supremo descartó de esa forma un fallo emitido por la Comisión de Derechos Civiles de Colorado contra el propietario de Masterpiece Cakeshop, en Lakewood, alegando los derechos de Phillips a acogerse a la Primera Enmienda.
El repostero había sido juzgado previamente a través de múltiples fases en un litigio por haber violado la ley contra la discriminación del estado. Abogados mediante, argumentó ante la corte que “él es un artista que no debería verse obligado a crear una tarta que contradiga sus puntos de vista religiosos”.
La decisión, redactada por el juez conservador Anthony Kennedy, concluyó que para el pastelero “crear una tarta de bodas para una pareja del mismo sexo sería el equivalente a participar en una celebración contraria a sus creencias más profundas”.
El fiscal general Jeff Sessions también dijo estar “encantado” con la decisión del Tribunal Supremo. El máximo responsable del Departamento de Justicia aseguró que desde el área que dirige continuarán “defendiendo vigorosamente” la libertad de expresión y religión.
“La Primera Enmienda prohíbe a los Gobiernos discriminar a los ciudadanos por sus creencias religiosas. El Tribunal Supremo concluyó correctamente que la Comisión de Derechos Civiles de Colorado no mostró tolerancia y respeto por las creencias del señor (Jack) Phillips”, dijo Sessions, citado por EFE.
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