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Madre cubana recibe 75 dólares de indemnización tras demandar al chofer negligente que provocó que le amputaran el brazo

Ytteb perdió su brazo izquierdo cuando el chofer del vehículo en el que viajaba se quedó dormido al volante.

Accidentes en Cuba © Juventud Rebelde
Accidentes en Cuba Foto © Juventud Rebelde

Este artículo es de hace 5 años

Una joven madre de dos niños, radicada en Santiago de Cuba, denunció a la prensa estatal que solo recibió poco más de 75 dólares tras demandar al chofer que provocó el accidente en el que perdió su brazo izquierdo en enero del año pasado.

Ytteb Sladys Domínguez Font, de 36 años, sufrió serios daños en un accidente de tránsito, cuando el chofer del vehículo en el que viajaba se quedó dormido al volante. Los médicos debieron amputarle el brazo y a partir de ahí comenzó su pesadilla.

Primero, estuvo meses sin poder recibir la prótesis que le recetaron por problemas de transporte entre la fabricante, ubicada en La Habana, y el Taller de Prótesis Ortopédicas de Santiago de Cuba, un problema que tampoco tardó en denunciar a la prensa oficial.

Esta semana, Domínguez Font (con domicilio en Carbot No. 92, entre Coronel Chávez y Final, municipio San Luis) debió recurrir de nuevo a la sección Acuse de Recibo del diario Juventud Rebelde para alzar la voz por sus derechos.

Ytebb explicó que, por las quemaduras debidas a fricción en la piel, tuvo que someterse a un largo proceso de curas, que le significaron, de inicio, tres viajes a un hospital de la cabecera provincial.

“Me realizan el 7 de marzo de 2017 el injerto (de piel), y tengo que comenzar las curas días alternos, por más de tres meses, alquilando carros para ir a Santiago, teniendo un valor por viaje de 300 pesos, además de tomar antibióticos, (…) tenía todo el muslo lesionado de la extracción de la piel y el brazo con el injerto; noches inolvidables de dolor, sin sacar la cuenta de la alimentación, daño psicológico (…) a mis hijos”, relató.

Cuando un oficial de la policía le tomó declaración y preguntó por los gastos realizados, la joven apuntó que los calculaba sobre los 15.000 pesos (alrededor de 625 dólares), aunque todavía no habían terminado sus curas y se debía enfrentar a otra nueva operación.

“El investigador me explica que hasta ese momento iba a poner ese monto, que después de realizado el juicio yo podía realizar una demanda por lo civil y reclamarle al chofer culpable del accidente los gastos realizados posteriormente”, contó.

Sin embargo, cuando se personó el pasado 20 de abril en el Tribunal Popular Provincial por citación oficial, le hicieron entrega de una carta en la que se expresa que la sentencia se hizo firme desde el 12 de febrero.

“Mi indemnización sería de 1.867 pesos (cerca de 75 dólares), y de esto la Caja de Resarcimiento hace descuento, ni siquiera se va a cobrar al instante, porque dicha caja pasan los años y no tiene dinero”, escribió la joven, que naturalmente no está de acuerdo con la sentencia.

Según señaló, la cifra ni siquiera se acerca a lo que declaró basándose en los gastos puros y duros que ha debido afrontar. “¿Basándose en qué realidad se fijan estos valores?”, pregunta el periódico.

“¿En la realidad ‘real’, o en otra, que solo existe en las regulaciones dictadas muchos años atrás? ¿Qué recursos de apelación le quedan a la afectada? ¿Por qué la citaron en abril y la sentencia se había hecho firme desde febrero?”, acotó la nota, a la que le suele suceder una respuesta por parte de los organismos involucrados en la denuncia.

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