A pesar de que los medios de prensa locales insistieron el pasado 4 de junio en demostrar que todo andaba bien, y como cada año publicaron la habitual reseña del acto político en reconocimiento a los hombres y mujeres que integran las filas del Ministerio del Interior; lo cierto es que no todo anda bien con el MININT en Villa Clara.
El semanario provincial Vanguardia, órgano oficial del PCC en el territorio, encabezó su nota por el 57 aniversario de ese ministerio con una imagen del momento en que Julio Lima, Primer Secretario del Partido en la provincia le entrega un reconocimiento al teniente coronel Gustavo Díaz Villalobos, a quien se identifica en el pie de la foto como Jefe del Ministerio del Interior en Villa Clara.
Esa simple foto ha servido para certificar el rumor que desde hace semanas circula entre los villaclareños: el antiguo delegado, el Coronel Diego Velázquez Gutiérrez y una buena parte de la jefatura del MININT, fueron removidos de sus cargos por supuestos hechos de corrupción.
Como es de esperar no se informó absolutamente nada a la población respecto a estas destituciones, y hasta la mencionada nota informativa con su foto, figura en la página digital del periódico, pero fue retirada de la edición impresa correspondiente al 9 de junio.
Sin embargo, la información se filtró desde mucho antes, y ha generado toda suerte de interpretaciones y versiones, entre las cuales existen elementos confluyentes.
Una fuente consultada, perteneciente a las estructuras del Ministerio del Interior, confirmó la democión, aunque explicó que ahora mismo existe mucha confusión entre los propios oficiales y suboficiales que integran los diferentes órganos del MININT en la provincia: “Los detalles han sido bien resguardados entre los instructores penales y de la contrainteligencia, no obstante, se nos ordenó guardar estricto silencio, y no comentar nada al respecto”.
Según indicó, la actual crisis parece haberse desencadenado tras las fuertes evidencias probatorias de una serie de hechos de corrupción, donde varios altos oficiales incurrieron en prácticas de abuso de poder y extorsión, de conjunto con sus subordinados.
Ello se corresponde con los rumores populares que indicaban como causa de las destituciones la existencia de una red de “agentes del orden” que acostumbraban a chantajear y extorsionar a campesinos, carretilleros, choferes, zapateros y otras figuras del trabajo no estatal.
Algo similar se comentaba ya, hace varios meses atrás, cuando también fueron removidos de sus cargos —repentinamente y sin explicación oficial mediante— la entonces presidenta de la Asamblea Provincial del Poder Popular Jorgelina Pestana Mederos, y el jefe de la PNR en Villa Clara, el teniente coronel Francisco Darias, quien pasó a ocupar idéntica responsabilidad, pero en el municipio de Camajuaní. En el caso de Pestana no se conoce ni su paradero, ni su condición judicial.
Otras versiones apuntan que la jefatura del MININT en Villa Clara tuvo participación directa en una trama de corrupción que ha sacudido más recientemente al municipio de Ranchuelo, y donde los delitos de hurto y sacrificio de ganado mayor parecen robarse el protagonismo.
Por el momento, y como sugiriera un cuentapropista, las autoridades políticas y gubernamentales de turno en Villa Clara, apuestan por el secretismo absoluto tras los cómodos telones de la seguridad nacional, mientras hacen homenajes y entregan reconocimientos a aquellas estructuras que lo mismo enfrentan, que también incurren, en hechos de corrupción.
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