Bélgica hizo historia en el Mundial de Rusia certificando su pase a semifinales tras eliminar a Brasil (1-2), que vendió muy cara su piel.
Un gol en propia puerta de Fernandinho, que previamente rozó Kompany de cabeza en el primer palo, puso el 0-1 cuando apenas se habían jugado 13 minutos de partido.
El segundo gol llegó en el minuto 31 con Kevin de Bruyne como protagonista después de ejecutar un preciso disparo desde fuera del área. Un tanto que inició Lukaku en un rápido contraataque y que terminó con el balón en el fondo de la red de la portería defendida por Alisson.
La insistencia de Brasil en la segunda parte tuvo su premio en el minuto 75 cuando Renato Augusto cabeceó un centro milimetrado de Coutinho.
Las embestidas de Brasil desembocaron en un partido de ida y vuelta, pero el acierto del portero Courtois evitó que el encuentro llegara a la prórroga.
Bélgica desde la Copa del Mundo de 1986, que terminaron en cuarta posición, no había llegado a las semifinales.
La victoria en cuartos de final de la selección belga representa todo un éxito para la que es posiblemente la mejor generación de futbolistas que ha tenido este país. Desde la Copa del Mundo de 1986, que terminaron en cuarta posición, no habían pisado las semifinales.
Los de Roberto Martínez lucharán por una plaza en la final el próximo 10 de julio ante Francia, que eliminó a Uruguay.
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