La asociación de manteros (vendedores ambulantes) de Barcelona asegura que el turista cubanoamericano ha dado una versión falsa de la historia.
Este viernes Jose Bravo, de 51 años, dijo que había intentado defender a una mujer y le golpearon. En la entrevista que concedió a medios locales pueden verse los golpes que recibió.
No obstante, los vendedores dicen que la historia está tergiversada.
“No es justo que nos presenten como los agresores, fuimos los agredidos”, explican.
El portavoz de la asociación contó que todo había comenzado cuando dos hombres borrachos intentaron regatearle el precio de un bolso a uno de los vendedores y como no llegaron a un acuerdo estos le dieron “dos botellazos” (uno en la nuca y otro en la espalda).
Un grupo de vendedores que se encontraba en el área salieron a defender a su compañero y, en medio de la pelea, una mujer salió de un bar y comenzó a propinarles golpes también.
Según a versión de ellos, Bravo también se unió. “No pintaba nada allí y salió solo a pegarnos. Podemos aguantar que nos insulten, pero no que nos peguen”, explicaron.
Ellos explican además que el vendedor agredido también está herido y creen que las imágenes que circularon por las redes sociales de la pelea “no muestran la realidad porque siempre se busca atacar a los manteros”.
El cubanoamericano tiene otra versión de la historia. De acuerdo a su testimonio él estaba paseando y vio "que unos manteros, que nosotros los llamamos africanos en nuestro país, estaban atacando a una mujer y nadie la defendía".
"Me puse en medio y entonces me empezaron a atacar y tuve que correr porque sentí que mi vida corría peligro. Me rajaron el cráneo y fue un golpe específicamente para matarme porque ellos sabían donde pegaban", explicó.
Después de su experiencia en Barcelona, José Bravo aseguró que no pretende regresar a España.
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