Dos hermanos, de 14 y cinco años, recibieron un disparo cada uno mientras pedían dulces en su vecindario de Olney, en Filadelfia, informó Telemundo.
Makiya Williams y su hermano Mael Howel habían salido a celebrar Halloween en las calles de su barrio, cuando alrededor de las 6:15 p.m. quedaron atrapados en medio de una balacera.
A la mayor una bala le rozó su pierna derecha, pero el más pequeño sí recibió un disparo en su pierna izquierda que le fracturó el hueso.
Ambos fueron transportados de emergencia al hospital de Einstein. La chica ya fue dada de alta, pero el menor continúa ingresado, aunque su condición estable.
Los hechos tuvieron lugar en 5700 de Hope Street.
Según el inspector jefe de la policía de Filadelfia, Scott Small, dos hombres empezaron a dispararse mutuamente.
“Sabemos que al menos seis tiros fueron disparados con dos armas semiautomáticas de distintos calibres”, reveló.
Otras balas atravesaron la ventana de una vivienda y un vehículo que estaba parqueado, sin causar heridas.
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