Santhy Naranjo llegó a Cuba el pasado 4 de enero tras ser deportado desde Estados Unidos, donde entró por Laredo (Texas) tras una larga travesía.
Este inmigrante cubano denunció ante el periodista Pedro Sevcec, de América Tevé, el maltrato que sufrió por parte de las autoridades norteamericanas.
"El 3 de enero me trasladan a Houston, donde dormí una noche y el día 4 vuelo pensando que iba a Miami, pero me dijeron que era directo a La Habana", aseguró al citado medio en la entrevista que se realizó vía telefónica desde Ciego de Ávila.
"Íbamos un muchacho de Camagüey, otra muchacha, un chico de La Habana y yo. Nosotros tres queríamos volver pero el caso del joven de La Habana todavía no había terminado. Cuando se enteró de que el vuelo era directo a la Isla, les dijo a los oficiales que no ir a Cuba porque todavía estaba apelando, relató.
A partir de ahí Naranjo explicó que los agentes reaccionaron contra ellos y cometieron actos de maltrato. "Uno de los oficiales me puso las esposas en el suelo", confesó. "Les expliqué que nosotros queríamos regresar, pero que no era el mismo caso que el de este chico", añadió.
Este ciudadano de la Isla aseguró que en todo momento mostró su deseo de cooperar. "Les dije que mi intención era cooperar porque quería ir a Cuba, pero no podía ser a la fuerza ni a base de golpes", lamentó.
El migrante explicó que otro agente, al comprobar sus intenciones, optó por quitarle las esposas.
Naranjo sigue sin olvidar la dura estancia que vivió en el territorio estadounidense. "Me costó mucho dinero y sacrificio. Tengo amigos que llevan un año allí y es muy fuerte porque no es lo que nos habían dicho. Todo es mentira", avisó.
En el reportaje del citado medio también se recopilaron testimonios de cubanos desde diferentes cárceles migratorias del estado de Louisiana. Todos ellos denunciaron que viven en pésimas condiciones, con una comida pésima y que, además, sufren actos de maltrato psicológico por parte de los agentes del ICE.
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