Tras varios intentos, los gladiadores cubanos se fueron con las manos vacías del XXX Grand Prix Ivan Yariguin de lucha libre, celebrado en la ciudad rusa de Krasnoyarsk.
El sábado, Yaquelín Estornell (62 kilogramos) y Damián Solenzal (65) cedieron en sus pleitos por las medallas de bronce y algo similar aconteció este domingo, cuando Franklyn Marén (74), Arturo Silot (86), Milaymis Marín (72) y Mabelkis Capote (76) cayeron en busca de acceder al podio de premiaciones.
Sobre los últimos resultados, conocimos que Marén sucumbió ante el local Magomed Kurbanaliev; Silot no pudo frente al mongol Uitumen Orgodol; la monarca olímpica de la juventud, Marín, cedió ante la mongola Nasamburmaa Ochirbat; y Capote cayó contra la alemana Aline Rotter.
Dentro de la actuación antillana, la nota más negativa fue al historial del habanero Reineris Sala (97), multimedallista mundial y quinto olímpico en Río-2016. “El Gimnasta” cedió 7-7 ante el ruso Igor Ovsiannikov (fue el último en marcar), quien no pudo arrastrarlo.
Ninguno de los 13 representantes de la Isla logró obtener premios. No obstante, la gira de la lucha cubana por territorio euroasiático forma parte de la preparación para los Juegos Panamericanos de Lima-2019.
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