Al esposo de la opositora cubana Leidys Tabares, líder del grupo Flamur Cuba, no pudieron salvarle una pierna a casua de las malas condiciones del Hospital Clínico Quirúrgico Manuel Ascunce Domenech de Camagüey.
"No pudieron porque las condiciones del hospital (no son las mejores). Ellos no tienen nada para trabajar, y el día 24 de enero, ellos (los médicos) deciden amputarle la pierna", dijo Tabaras a Radio Martí.
Según relata, "los guantes son reciclables y no hay algodón".
También dijo que el centro carece de materiales y equipos médicos, la higiene no es la mejor y la alimentación es mala.
"La comida te puedo decir el menú: por la mañana solo leche de agua; y en el mediodía es arroz, potaje y un huevo hervido; y por la tarde es picadillo, sopa y arroz", dijo Tabares, quien permaneció junto a su esposo, ingresado del 2 de enero al 10 de febrero.
Relata además que para la amputación de la pierna utilizaron agua de tanques.
Dijo además que hay pocos baños en las salas para la cantidad de pacientes que asisten al hospital.
Para nadie es un secreto que el sistema de salud cubana se encuentra en crisis.
Recientemente, una familia denunció las pésimas condiciones higiénico-sanitarias del Hospital Clínico Quirúrgico Dr. Miguel Enríquez (La Benéfica), en La Habana, donde puedes encontrar a menudo cucarachas o ratones.
Lo mismo sucede en el Hospital General Docente Mártires del 9 de Abril de Sagua la Grande, inaugurado por Fidel Castro el 9 de abril de 1968, y en el que pueden verse los cables pelados en el techo, las puertas carcomidas, las tuberías al descubierto y los azulejos sin reponer en las paredes.
Por otra parte, la escasez de utencilios o medicamentos es cada vez más una realidad. Según el propio Ministerio de Salud (Minsap), al cierre de 2018 tenían 36 medicamentos en falta en las farmacias del país, y así se comenzó este 2019.
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