El Ministerio del Interior ha responsabilizado a grupos criminales integrados por extranjeros y emigrados cubanos de tratar de introducir drogas en el país, informó el diario Granma.
El Gobierno de Cuba incautó el pasado año 2.438 kg de sustancias prohibidas, de las que el 77 % fue por concepto de recalos capturados en las costas.
Según el informe anual del organismo, las autoridades se enfrentaron a operaciones organizadas por cubanos radicados en el exterior que emplearon lanchas rápidas para su traslado en rutas cercanas al país.
En este sentido informaron que se frustraron dos intentos de introducir narcóticos usando esta vía, acciones que terminaron con cuatro detenidos y 144 kg de marihuana requisados. También fueron paralizadas dos operaciones en aguas territoriales, se detuvieron dos traficantes extranjeros y se decomisaron otros 132 kg de marihuana.
Por el canal aéreo se neutralizaron 49 operaciones, con un saldo de 90 arrestados (54 cubanos y 36 extranjeros) y 81 kg de drogas ocupadas.
De acuerdo a la información brindada, la mayoría de los hechos fueron organizados y financiados en el exterior por emigrados cubanos, para lo cual utilizaron correos de varias nacionalidades y el origen en varios países, así como herramientas de Internet como Imo y WhatsApp.
Los 2.438 kg de drogas confiscados representan la menor cantidad de los últimos tres años, y se distribuyen en 2.071 kg de marihuana, 363 de cocaína, tres de cannabinoides, uno de crack y 0,15 de hachís.
No obstante, el MININT insiste en que ello no quiere decir que hayan disminuido el riesgo regional ni interno.
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