Sao Paulo, 27 mar (EFE).- La organización defensora de los Derechos Humanos Human Rights Watch (HRW) criticó este miércoles la decisión del mandatario de Brasil, el ultraderechista Jair Bolsonaro, en restablecer las celebraciones de "una dictadura brutal", marcada por "miles de casos de tortura y ejecuciones".
El director de la entidad en las Américas, José Miguel Vivanco, destacó en un comunicado que "Bolsonaro critica con razón los gobiernos cubano y venezolano", pero al mismo tiempo "celebra una dictadura militar en Brasil" que ha causado un "sufrimiento indescriptible a decenas de miles de brasileños".
"Es difícil imaginar un ejemplo más claro de doble vara para medir", recalcó el director, en alusión a la decisión de Bolsonaro, un capitán de la reserva del Ejército que asumió la Presidencia brasileña el 1 de enero, de liberar las conmemoraciones del golpe de Estado de 1964, que dio lugar a una dictadura que gobernaría el país sudamericano por dos décadas, hasta 1985.
HRW recordó en la nota que el golpe militar de 31 de marzo de 1964 depuso a Joao Goulart, "un presidente democráticamente electo", y que la resolución ahora del mandatario "revirtió la política establecida" en 2011 que determinaba a las Fuerzas Armadas la "suspensión de cualquier conmemoración del golpe".
La entidad recalcó que, con su decisión, "Bolsonaro está celebrando que 4.841 representantes electos fueron destituidos del cargo, aproximadamente 20.000 personas torturadas y al menos 434 personas muertas o desaparecidas".
"Miembro de las fuerzas armadas durante la dictadura, Bolsonaro defendió repetidamente el régimen militar durante sus casi 30 años como diputado federal", expresó HRW y completó que el presidente "se refirió diversas veces a uno de los peores torturadores como héroe".
Durante el juicio político que despojó a Dilma Rousseff del poder en 2016, el entonces diputado dedicó su voto al coronel Carlos Alberto Brilhante Ustra, uno de los jefes del aparato represivo de la dictadura.
En su discurso, Bolsonaro se refirió a Ustra como el "pavor de Dilma Rousseff", quien fue torturada por el coronel durante la dictadura.
Asimismo, el organismo subrayó que, hasta el momento, nadie fue responsabilizado por los "abusos" cometidos en ese periodo.
El líder ultraderechista acumula un extenso historial de declaraciones polémicas y consideradas de tintes autoritarios, homofóbicos y misóginos.
"Recientemente, Bolsonaro elogió al exdictador paraguayo Alfredo Stroessner como un hombre de visión, un estadista", recordó HRW.
Añadió que, después de que el ministro de la Presidencia, Onyx Lorenzoni, declarara que el exdictador Augusto Pinochet "tuvo que dar un baño de sangre" y elogiara la política económica del chileno, el mandatario brasileño dijo que las dictaduras del Cono Sur "pacificaron la región".
En el comunicado, HRW recordó además una de las víctimas más emblemáticas de la dictadura militar, el periodista Vladimir Herzog, quien fue brutalmente torturado, asesinado y tuvo su suicidio forjado en 1975 por agentes del régimen.
"Estoy indignado. Celebrar el golpe es una ofensa, una tortura continuada para las familias" de las víctimas, criticó el hijo del periodista ejecutado, Ivo Herzog, citado en la nota.
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