En los primeros tres meses de este año, en la provincia de Camagüey hubo 216 nacimientos menos que en el mismo período del año anterior, lo cual se reconoce como uno de los factores del envejecimiento de la población regional, según puede leerse en el diario oficial Adelante.
El reporte explica admás que “la provincia trabaja con fuerza” en la disminución del número de embarazos adolescentes y el aborto en esta edad porque las cifras son alarmantes.
Las embarazadas en etapa precoz representan un 22% del total de las gestantes, según los datos oficiales que recoge el diario citado.
Hace un año la agencia de noticias Efe reportaba que los índices de natalidad en Cuba continuaban disminuyendo, después de que en 2016 la Isla registrara 8.192 nacimientos menos que en 2015.
En un estudio publicado en el Health Policy and Planning de la Universidad de Oxford se concluía que Cuba es uno de los países con las tasas de aborto más altas del mundo, con 72.8 abortos por cada 100 nacimientos.
Entre las técnicas empleadas por Cuba para manipular las estadísticas, decía esta investigación, están la reclasificación de muertes neonatales como muertes fetales, por ejemplo. De ahí que el sistema de salud cubano exhiba entre sus estadísticas un índice de natalidad equiparable a los de países del Primer mundo.
"Los médicos cubanos reclasificarían las muertes neonatales como muertes fetales tardías para cumplir con los objetivos del gobierno para la mortalidad infantil" y "evitar sanciones", reseñan estos investigadores.
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