Cada vez son más comunes los brotes diarreicos y enfermedades de naturaleza digestiva en Villa Clara. En lo que va de 2019 en esta provincia han tenido lugar seis intoxicaciones alimentarias, dejando como saldo un centenar de enfermos, según ha dado a conocer la emisora local CMHW.
“Fundamentalmente están dados por la mala higiene del manipulador de alimentos, por violar las normas básicas para la conservación, o una deficiente congelación o descongelación de los productos. La gran mayoría de los brotes que han ocurrido hasta el momento han sido por violar estas normas. Siempre hemos recalcado que es muy importante el lavado de las manos, así como la correcta desinfección de los utensilios, las mesetas y espacios de elaboración”, explicó la doctora Yamilé Medina Padrón, jefa del departamento de higiene e inocuidad de los alimentos de la dirección provincial de Salud Pública en Villa Clara.
La especialista precisó a la radio santaclareña que en el primer trimestre de 2019 las intoxicaciones alimentarias más frecuentas han estado asociadas a carnes y picadillos en salsa, así como aquellos alimentos que emplean el huevo crudo en su preparación, como son los merengues y principalmente las mayonesas caseras, cuando no se acidifican de manera correcta.
Si bien se plantea que dichas intoxicaciones son más comunes al consumir alimentos provenientes de paladares y dulcerías particulares, para nadie es un secreto que desde las entidades estatales se actúa de manera irresponsable y poco higiénica.
Carne en mal estado, queso con gusanos y bolsas de leche con moscas y otras impurezas, son solamente algunos de los casos denunciados con anterioridad desde Villa Clara, por no hablar de las cafeterías y restaurantes estatales.
“Los cuentapropistas, como tenemos detrás de nosotros a los inspectores, tenemos que extremar la higiene, despachar con cogederas o pinzas, usar guantes y tener mucho cuidado con la calidad del agua o la caducidad de los alimentos, porque sabemos que cualquier descuido nos puede costar la licencia”, asegura Yusumí Rodríguez, vendedora de alimentos en la zona hospitalaria de Santa Clara.
Sin embargo, esta misma joven se pregunta: “¿Quiénes controlan a los trabajadores del estado? Los inspectores no ven cuando manipulan los alimentos con las manos descubiertas, o cómo tiran los alimentos, o los ponen en el piso. Yo he visto cucarachas caminando por los mostradores estatales y eso es muy difícil que lo encuentres en los negocios particulares”.
En julio pasado medio centenar de pacientes, entre ellos una veintena de niños, fueron hospitalizados en el territorio luego de ingerir cakes en mal estado. Por su parte, el 7 de abril del 2018, el periódico Juventud Rebelde daba cuenta de otra intoxicación masiva acontecida en la provincia en su artículo titulado “Caso Mayonesa… y otros manjares peligrosos”.
Dentro del centenar de casos que se reportan en 2019 en Villa Clara se incluyen además intoxicaciones por la ingesta de productos químicos o de frutos como el piñón de botija; casos de mayor incidencia entre los menores de edad, indicó la jefa del departamento de higiene e inocuidad de los alimentos de la dirección provincial de Salud Pública.
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