Un enorme trineo dorado llama la atención de los habaneros en estos días de Bienal. Está lleno de remiendos y campanitas, como si formara parte de un recuerdo bastante erosionado, y brilla bajo el intenso sol de mayo en el Malecón de La Habana, como parte del proyecto Detrás del Muro.
Este trineo dorado, en el Malecón, es un objeto demasiado anacrónico como para no ser significativo. Y así, cada espectador le encuentra una explicación: tal vez significa la obsesión de los cubanos con el Norte y el frío, quizás es solo un objeto que intenta desplegar la fantasía del espectador con paisajes nevados y exóticos.
En concreto, se trata de un trineo gigante, todo de acero soldado, hecho de remiendos, de pedazos, de cosas encontradas. Según el artista, el trineo representa una idea sobre la proyección de imaginarte en un lugar mejor que donde estas, pero que todo se construye, todo es fabricado, incluso las ilusiones.
El Trineo Dorado es una instalación de Enríquez Martinez Celaya, quien vuelve por primera vez a La Habana, la ciudad donde nació y de la cual se fue hace 47 años, cuando tenía solo siete. Vivió en España y Puerto Rico, y luego se instaló en Estados Unidos. Allí estudió física molecular antes de comenzar su vida de artista.Según ha declarado en varias entrevistas, el reencuentro con la Isla es muy intenso tanto en lo personal como en lo profesional.
Martínez Celaya suele indagar en los procesos de la memoria y la representación, en la construcción del significado y del sentir, de modo que El trineo dorado tampoco es algo raro en el marco de su creación, muchas veces relacionada con el breve tiempo que vivió en Cuba, y la fragmentación de esa historia.
De este modo, El trineo dorado tiene que ver con un proceso de reinvención de la memoria, puesto que el proceso de irse de un país tiene que ver con la idea de construir una nueva vida con remiendos de la historia. La obra parte de la idea de crear algo fallido, como un trineo dorado, algo lujoso pero construido con piezas desechadas, y que es capaz de resistir, y mantenerse erguido frente al mar, al horizonte.
Detrás del Muro nació en 2012, de una conversación íntima con el mar, según cuenta a la AFP su creador y actual director, Juan Delgado. El Malecón ha sido usado por varios artistas intencionadamente, en tanto se trata de una de las aceras del estrecho de Florida, la otra es Miami, odiada o anhelada por muchos cubanos que viven en la Isla. La Bienal se extiende desde el 12 de abril al 12 de mayo.
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