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Los Baños de Santa Rita: de manantial a un vertedero de deshechos en La Habana

Los vecinos han visto morir poco a poco el milagro que se le atribuía a sus aguas y que hoy solo son espacio para la fetidez, los deshechos y el abandono, denuncia el sitio 'Periodismo de Barrio'.

El manantial Santa Rita está ubicado en Guanabacoa, La Habana. © YouTube / Captura de video de Periodismo de Barrio
El manantial Santa Rita está ubicado en Guanabacoa, La Habana. Foto © YouTube / Captura de video de Periodismo de Barrio

Este artículo es de hace 4 años

Los manantiales de Santa Rita, en Guanabacoa, son solo un recuerdo del pasado para los habitantes de la zona. En las últimas décadas los vecinos han visto morir poco a poco el milagro que se le atribuía a sus aguas y que hoy solo son espacio para la fetidez, los deshechos y el abandono.

Periodismo de Barrio, medio de prensa independiente cubano dedicado a temas ecológicos y medioambientales, produjo un audiovisual que recopila el testimonio de personas que conocieron personalmente o a través de otros, de los poderes curativos de los Baños de Santa Rita.

“Antiguamente era un río donde las personas se bañaban” cuenta uno de los entrevistados. Una señora, que aún no vivía en Guanabacoa en ese tiempo, refiere que allí llegaban “gente de todos los lugares porque decían que eran curativos”.

Un señor, que lleva cinco décadas en la zona, recuerda bien el arroyo, sus cascadas limpios y las pocetas destinadas para que las personas se bañaran en sus aguas. “Cuando empezaron a hacer las distintas casas, que no tenían vertederos, [comenzaron] a verter el agua hacia el arroyo”, rememora.

Otro de los vecinos de la zona cuenta que con el tiempo “empezaron a tirar el desagüe de los edificios” y “ahora la gente tira cantidad de basura y se va acumulando”.

Los efectos se hacen sentir. La comunidad, que antaño era famosa por su manantial, es hoy un sitio que a sus habitantes no les da orgullo.

“En la comunidad lo que provoca son epidemias (…) mientras sigan botando basura”, asegura una mujer. Por su parte otra señora afirma que “cuando pasa tiempo sin llover la fetidez es extrema, nos afecta mucho el mal olor que circunda por todas las casas”.

La responsabilidad, aseguran, es de la población y del gobierno. “Se nos hace la convocatoria a que no echemos desechos sólidos (…) pero hay personas que vierten directamente la basura de su casa ahí” reconocen los locales.

“Para los que viven por aquí es más fácil llegar, echar la jabita de basura, que salir caminando a botar la basura” dicen, a la vez que reconocen la lentitud de la empresa de Servicios Comunales para realizar las labores de saneamiento.

Santa Rita pasó de ser un manantial a un vertedero de deshechos, señala Periodismo de Barrio.

En Cuba existen más de 3 mil focos contaminantes que afectan la calidad de las aguas en las diferentes cuencas hidrográficas del país. Así lo han reconocido autoridades de Recursos Hidráulicos.

Uno de los más alarmantes es el río Cauto, donde se han identificado 58 focos tóxicos que lo perjudican. La causa de esta situación se desplaza entre la indisciplina social y la inexistencia de una red de desagüe en la ciudad de Holguín.

Diversas iniciativas han sido llevadas a cabos por ciudadanos con conciencia ecológica que protagonizaron uno de los retos virales más elogiados de los últimos tiempos en las redes sociales: El Trash Challenge. La idea es transformar un espacio contaminado recogiendo la basura.

Así lo hicieron en el río Almendares cerca de medio centenar de jóvenes que se sumaron a higienizar la desembocadura de este importante sitio capitalino, uno de los más contaminados.

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