El gobierno que preside Jair Bolsonaro formalizó su decisión de retirar a Brasil de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac).
Según las fuentes consultas por el diario O Globo, este movimiento se produce por la presencia en el organismo de los gobiernos de Cuba y Venezuela.
Además esta decisión implica romper con el proyecto de unidad regional que dio vida a la organización continental.
El Ejecutivo de Bolsonaro considera que este organismo no tiene condiciones para actuar de forma adecuada en el actual contexto de crisis regional.
"Brasil no cree que en el contexto de la crisis regional haya condiciones para participar en Celac", rezó el comunicado de la oficina de prensa de la Cancillería brasileña.
Con el cambio de gobierno, Brasil se ha convertido en una de las voces más críticas con el régimen cubano. En noviembre del año pasado, La Habana decidió no continuar participando en el Programa Mais Médicos y retiró a los más de 11.000 profesionales de la salud que estaban en este país.
Asimismo los mandatarios cariocas no reconocen a Nicolás Maduro como dirigente de Venezuela. En su momento apoyaron al presidente interino del país petrolero, Juan Guaidó.
Brasil había dejado de participar en las actividades de la Celac el año pasado por discrepancias con Bolivia, que por aquel entonces ostentaba la presidencia temporal del organismo. También mantuvo su decisión de alejarse bajo la presidencia de México.
La semana pasada se celebró la cumbre CELAC 2020, en la que México asumió la presidencia pro tempore del organismo. Únicamente cuatro naciones no enviaron representantes a la capital mexicana: República Dominicana, Trinidad y Tobago, Bolivia y Brasil.
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