La cubana Yaime Pérez Acuña está contenta porque, tras un año sin ejercer la medicina porque el gobierno de Miguel Díaz-Canel decidió poner fin al programa Mais Médicos con Brasil, volverá a atender a pacientes para frenar el brote de coronavirus en ese país.
"Volver a practicar después de todo este tiempo es un alivio. Estoy muy feliz de poder ayudar", dijo la especialista al medio local G1 de Minas Gerais, donde trabaja como camarera en Belo Horizonte, como otros galenos cubanos para poder vivir hasta regularizar su situación.
El Ministerio de Salud brasileño publicó este jueves una convocatoria pública para la reincorporación de "los estudiantes de intercambio y de cooperación internacional", al nuevo proyecto relanzado por el presidente Jair Bolsonaro. Desde la semana pasada se conocía esta posibilidad, según adelantó la prensa.
Pese a que su hija pequeña permanece en Cuba, esta madre decidió volver a Brasil para regular su situación y volver a ser doctora en ese país. En la ciudad de Crucilândia trabajó desde marzo de 2017 hasta que a finales de 2018 el gobierno cubano decidió dar por finalizado el programa Mais Médicos.
Esta especialista en medicina familiar y enfermedades tropicales como el dengue llegó a atender durante ese período a unas 20 personas diarias. Entonces cuidó a pacientes con enfermedades crónicas, niños y mujeres embarazadas, agrega la fuente.
"Estoy muy emocionada de poder volver a trabajar como médico. La enfermedad está avanzando aquí y quiero ayudar", aseguró esta cubana que aún desconoce a qué hospital será destinada.
En Brasil hay cerca de 3 000 personas con la COVID-19, exactamente 2 988, de los cuales fallecieron 77, según los datos recopilados por el hospital y universidad médica Johns Hopkins.
De momento solo seis personas fueron dadas de alta tras superar esta enfermedad que continúa sin cura y ya afecta a más de 549 000 personas en el mundo.
Una doctora cubana en Brasil para ayudar
Yaime Pérez Acuña contó a G1 de Minas Gerais en 2019, unos meses después del fin del convenio médico entre los gobiernos de Cuba y Brasil, que esa situación fue sorpresiva para ella y otros doctores de la isla.
"Fue una sorpresa. Aprendí lo que iba a pasarle a mi vida en los periódicos. No hemos tenido información del gobierno cubano", recordó los días de noviembre cuando el gobernante designado Díaz-Canel decidió la retirada de los galenos de Brasil tras las peticiones hechas por Bolsonaro.
Desde que llegó a Brasil se dio cuenta que había mucho por hacer en cuanto a la salud, pero sus ganas de ayudar se vieron truncadas por el fin de Mais Médicos. Entonces estaba con su hija pequeña, a quien decidió a enviar de regreso a Cuba por la situación de inestabilidad.
“Extrañar a mi hija es lo que más me duele. Pero, para mí, es un sueño vivir en Brasil. Desde que eras pequeña, ¿sabes? Por las telenovelas que estaban poniendo en Cuba. Y el trabajo que hice en Crucilândia fue muy gratificante. Estudié durante seis años y me especialicé por otros dos años. Tengo mucha experiencia. Soy médico, quiero hacer todo lo que está bien. Quiero ayudar", confesó a G1.
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