El papa Francisco ha iniciado un fondo de emergencia para ayudar a las zonas afectadas por el coronavirus en los países en desarrollo.
El Papa ha destinado 750 mil dólares de fondos a su disposición como contribución inicial, según el Vaticano. Ha pedido a las entidades de la Iglesia y a las diócesis que contribuyan en la medida que puedan.
Los fondos serán distribuidos a través de las Sociedades Misioneras Pontificias, que apoyan el trabajo de más de 1.100 diócesis, principalmente en África, Asia, Oceanía y parte de la región del Amazonas.
A finales de marzo, el papa Francisco anunció que donaría para ayudar a combatir la pandemia del coronavirus, que ha dejado hasta el momento en Italia más de 16 mil fallecidos y en España más de 13 mil.
La oficina de prensa de la Santa Sede informó que los respiradores fueron entregados a la Limosnería Apostólica, que los distribuirá como gesto simbólico a algunos hospitales situados en las áreas más afectadas por el coronavirus.
La compra de 30 respiradores se suma a otras gestiones previas para acudir en auxilio de los afectados por el COVID-19 en Italia, el 12 de marzo, el papa Francisco, a través del Departamento para el Servicio de Desarrollo Humano Integral, donó 100 mil euros a Cáritas Italia, una ayuda sobre todo dirigida a la asistencia en favor de los pobres y de las personas más vulnerables del país.
A ello se suma que en días pasados el cardenal Krajewski entregó de parte del Papa Francisco 200 litros de leche fresca a familias necesitadas de Roma, como ayuda ante la actual situación que vive Italia.
El Pontífice presidió este domingo la celebración Eucarística del Domingo de Ramos, en la que invitó a no traicionar ni abandonar lo que de verdad importa. A los jóvenes los invitó a tomar como ejemplo a los verdaderos héroes de hoy y a jugarse la vida como ellos, sirviendo a los demás.
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