D-Neil Schmall, una joven enfermera de una Unidad de Cuidados Intensivos (UCII), rompió en llanto al describir su traumática experiencia durante la crisis sanitaria del coronavirus en Nueva York, ciudad convertida en el foco rojo de la pandemia.
"Estoy cansada de entrar en habitaciones y ver pacientes muertos. Entras en una habitación y hay un cadáver. Estoy cansada de llamar a familias para darles malas noticias", expresó.
En su testimonio, que se ha hecho viral en Youtube, la enfermera lamenta la pérdida de muchos de sus compañeros en el hospital, que murieron por atender a los pacientes sin las medidas de protección óptimas.
"Siento tanta tristeza por mis compañeros que han perdido la vida cuidando a otras personas. Simplemente no puedo más, lloro durante todo el camino a casa", explicó.
De acuerdo con Schmall, cada enfermera o enfermero en los hospitales de New York tiene asignados entre 10 y 14 pacientes con coronavirus.
Asimismo, narra que ella y sus colegas duermen de cuatro a cinco horas diarias y trabajan en turnos de entre 13 a 15 horas durante cinco o seis días a la semana.
La mayoría de sus equipos de protección personal son de plástico, detalló.
"No creo que la gente entienda lo estresante que es este trabajo. Todos se esfuerzan, todos nos esforzamos: todos lo hacemos", insistió.
Al final de su mensaje, aseguró que el personal médico también es humano y llamó a la compasión para enfrentar la pandemia.
"Somos humanos como cualquier otra persona. Tenemos emociones. Ahora es el momento que todos debemos tener compasión por los demás o, al menos, reconocer lo que sufre otra persona", subrayó.
Estados Unidos se ha convertido en epicentro de la pandemia de coronavirus con más de 610 000 casos confirmados y 25 856 muertes.
Especialmente el estado de Nueva York tiene más casos que cualquier país del mundo. En las últimas 24 horas allí se han registrado 778 nuevos fallecimientos, para un total de 190 288 infestados y más de 9 000 decesos.
Los médicos y enfermeras han padecido de cerca la tragedia, al punto que muchos de ellos después de intensas jornadas de trabajo dormían en sus autos por temor a contagiar el coronavirus a sus familiares.
"Muchos de nuestros miembros están durmiendo en sus autos porque existe la posibilidad de que vayan a casa e infecten a sus familias", aseguró el doctor Jason Saffon, integrante del servicio médico de emergencias, a Univision el pasado 1 de abril.
Una enfermera del Hospital Mount Sinai lamentó entonces la falta de medios con la que trabajan y alertó que los contagios también están haciendo mella en los profesionales sanitarios.
La crisis sanitaria ha rebasado todos los sectores de ese estado, pese a lo cual el presidente Donald Trump anunció que poco a poco pondría en marcha la mayor economía del mundo a pesar del COVID-19.
Esta mañana, el gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, dijo que no cumpliría una eventual orden del presidente para reabrir su estado de forma insegura durante el brote del coronavirus.
"Si me ordena la reapertura de una forma que ponga en peligro la salud pública de la gente de mi estado, no lo haría", afirmó Cuomo en una entrevista con CNN.
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