“Lo único que tengo que decir es que amamos nuestras vidas, amamos a Alejandro, y no estamos de acuerdo con lo que dicen de mi esposa”, dijo este sábado Aldo Ripley en unas breves declaraciones a la prensa sobre el asesinato de su hijo, un niño de 9 años con autismo.
El suceso conmocionó el sur de Florida, luego de que el viernes apareciera el cuerpo sin vida del pequeño Alejandro Ripley, tras la intensa búsqueda de las autoridades. El hombre, visiblemente conmocionado por la tragedia, manifestó su desacuerdo con las acusaciones respecto de su esposa y madre del menor, quien es señalada como presunta autora del crimen.
Las palabras del padre se produjeron justamente después de la audiencia de fianza de su cónyuge, Patricia, que ahora enfrenta acusaciones de asesinato premeditado en primer grado e intento de asesinato premeditado en primer grado.
En la noche del jueves, Patricia Ripley declaró a la policía que el pequeño había sido raptado supuestamente por dos hombres de tez negra, que le habían abordado desde un auto cerca de un Home Depot en el área de Kendall para pedirle dinero y drogas, pero, al negárselo, se llevaron al menor con ellos.
“El pasajero del auto salió del vehículo, se acercó a la madre y exigió drogas. Ella dijo que no tenía ninguna droga. Y entonces, este sujeto cogió el teléfono celular de la mujer y se llevó a su hijo”, había relatado el investigador de la policía de Miami-Dade, Angel Rodríguez.
“Debido a que esto involucra a un niño de nueve años autista, que no puede hablar, es importante que nosotros cubramos cada ángulo y hablemos con cada persona que vio lo que sucedió”, apuntó.
La policía desecharía su punto de partida luego de encontrar el cuerpo del niño flotando en un canal cerca de la cancha de golf del Miccosukee Golf y Country Club, ubicado en el área de Kendall Lakes, en la calle 62 y la 138 Court del suroeste.
“La alerta ámbar de Florida para Alejandro Ripley ha sido cancelada. Estamos muy tristes de informar que el niño fue encontrado fallecido”, expresó en Twitter el Departamento de Aplicación de la Ley de Florida (FDLE por sus siglas en inglés).
Los investigadores no pudieron confirmar la versión de Patricia, tras seguir la pista, en un comienzo, cerca del área de SW 158 Avenue y 88 Street, donde la madre expuso que había sido el presunto secuestro.
En cambio, la fiscal estatal de Miami-Dade, Katherine Fernández Rundle, aseguró que había videos de seguridad mostrando a la mujer empujando a su hijo a otro canal cercano. Tales imágenes fueron captadas alrededor de las 7:30 pm (hora local) del jueves.
Sin embargo, algunas personas oyeron gritos y acudieron a ayudar al niño, al que lograron rescatar entonces. “Pero una hora después ella volvió a empujar a Alejandro a otro canal y esta vez nadie pudo salvar al pequeño”, expuso la fiscal, según medios locales.
En otro video de vigilancia del estacionamiento del Home Depot de Kendall, cercano a donde la mujer dijo que habían raptado al niño, Fernández Rundle afirmó que se podía ver a la acusada esperando sola en el carro durante 15 minutos, antes de hacer la llamada a la policía.
Patricia Ripley se encuentra actualmente arrestada sin derecho a fianza. Ingresó en una cárcel de Miami-Dade sobre las tres de la madrugada de este sábado.
Después de varias horas de interrogatorio, Ripley admitió que ella estaba detrás de la muerte del pequeño Alejandro, cuya desaparición por presunto secuestro había desencadenado una intensa búsqueda en la zona West Kendall.
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