Decenas de cubanos varados en Rusia no pudieron regresar a la isla en un vuelo humanitario de Azur Air que salió rumbo a La Habana, debido a los altos precios de los boletos y cuestiones burocráticas.
El miércoles solo pudieron abordar el avión 23 cubanos, de más de un centenar que habían solicitado volver a su país luego de la medida del cierre de fronteras por el coronavirus, afirmó el cónsul de la nación caribeña en Moscú, Eduardo Lázaro Escandell, en declaraciones a la revista Sputnik News.
Además, lograron acceder a la aeronave "un grupo de funcionarios, trabajadores y sus familiares de la misión diplomática (de La Habana en Moscú), así como estudiantes cubanos que forman parte del Programa de las 100 becas que ya habían concluido el curso académico", explicó el cónsul.
Escandell precisó que "en el vuelo se fueron 23 ciudadanos cubanos y 43 estudiantes que culminaron estudios acá en Rusia", para un total de 66; más los diplomáticos, que completan la cifra de 80 pasajeros.
Según explicó, del grupo que se encontraba varado en ese país solo pudieron retornar aquellos residentes en Cuba que habían actualizado su situación migratoria ante el Consulado y que registraron su solicitud para retornar.
Algunos que cumplían con ese requisito, sin embargo, no pudieron reunir los 43.726 rublos (unos 630 dólares) que costaba el boleto, una cifra mayor a la de viajes regulares.
Otros también debían pagar una multa por haber sobrepasado la estancia permitida y la prórroga del pasaporte, cuyo valor llega a quintuplicarse (de 20 CUC a más de 100 dólares) fuera de Cuba.
Idalmis Moreno, quien se encuentra varada en la capital rusa junto a su familia, afirma que la situación es desoladora para muchos cubanos.
"Aunque hay una orden de Putin de que se puede trabajar sin permisos especiales mientras dure la pandemia, la realidad es que a los inmigrantes nadie los contrata. En nuestro caso, para regresar debemos pagar no solo el pasaje de avión, sino la multa por estar pasados de tiempo, más la prórroga del pasaporte. No hay dinero para eso", afirmó.
Anna Voronkova, una joven rusa que junto al habanero Pedro Luis García ha logrado recaudar fondos para repartir alimentos a los cubanos necesitados durante la pandemia, logró ayudar esta vez a cuatro personas que corrían riesgo de muerte en caso de contagio: tres con patologías crónicas y una embarazada.
A bordo del Azur Air iban 170 pasajeros, 80 de ellos cubanos y el resto de Brasil, Argentina y Chile.
Un comunicado de la Embajada cubana en Moscú agregó que en el vuelo se envió una donación del Gobierno ruso con al menos 15.000 test para la detección del coronavirus.
La situación de decenas de cubanos en Moscú durante la pandemia del coronavirus ha llamado la atención en las últimas semanas, luego de registrarse la muerte de dos mujeres que esperaban por regresar a la Isla.
La primera fue Lauren Morales Fernández, de 22 años, cuyo cadáver fue encontrado la semana pasada cerca de un contenedor de basura en la capital rusa.
Días después, falleció a causa del coronavirus Yenifer León, natural de Jovellanos, en Matanzas, quien había enfermado y no superó la gravedad.
También ha sido noticia la labor de decenas de activistas reunidos por Pedro Luis García, quienes se han dedicado a repartir alimentos entre las personas que se encuentran desamparadas en ese país debido al cierre de fronteras en Cuba.
La Isla cerró sus aeropuertos de forma parcial el pasado 24 de marzo y de forma total el 1 de abril, lo que ha dejado en una situación vulnerable en medio de la pandemia a centenares de cubanos en varias partes del mundo.
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