WASHINGTON, 9 jul (Reuters) - Las nuevas solicitudes de ayuda por desocupación en Estados Unidos bajaron la semana pasada, pero un récord de 32,9 millones de personas recibió cheques por desempleo en la tercera semana de junio, lo que sugiere que al mercado laboral le está costando salir de la desaceleración provocada por el COVID-19.
Economistas advirtieron de que no se debía esperar mucho del descenso de los pedidos iniciales informados el jueves por el Departamento del Trabajo. El período incluyó el Día de la Independencia el 4 de julio y los datos son volátiles cerca de los feriados.
Extensas áreas del país, que incluyen estados densamente poblados como Florida, Texas y California, lidian con alzas récord de nuevos casos de COVID-19, que han forzado a reducir o frenar la reapertura de negocios, lo que ha dejado nuevamente a algunos trabajadores en las casas.
"Los pedidos de ayuda por desempleo podrían haberse reducido por el feriado, pero no hay que engañarse: los problemas económicos todavía no terminan", dijo Chris Rupkey, economista de MUFG. "La cifra total de desocupados y de quienes están recibiendo ayuda es la peor a la fecha en esta recesión".
Los pedidos iniciales de ayuda estatal por desocupación bajaron en 99.000 a una cifra desestacionalizada de 1,314 millones en la semana al 4 de julio, desde los 1,413 millones previos, la decimocuarta semana seguida de descenso. Economistas consultados por Reuters calculaban 1,375 millones.
Las solicitudes, que treparon a la cifra histórica de 6,867 millones a fines de marzo, han ido cayendo de forma gradual, pero siguen siendo casi el doble del máximo en la Gran Recesión de 2007-09. Incluyendo un programa financiado por el gobierno, 2,3 millones de personas ingresaron pedidos la semana pasada.
Las personas que recibieron asistencia tras una semana inicial de ayuda se redujo en 698.000 a 18,062 millones en la semana terminada el 27 de junio. Los llamados pedidos continuos, que se reportan con una semana de desfase, escalaron al número récord de 24,912 millones a comienzos de mayo.
Se contaron 32,9 millones de personas que recibieron cheques por desempleo en todos los programas en la tercera semana de junio, un alza de 1,411 millones respecto de mediados de mes. El reporte, los datos más actualizados sobre la salud de la economía, mostraría que el mercado laboral tendría un retroceso en el crecimiento del empleo en julio.
El gobierno informó la semana pasada que se crearon 4,8 millones de puestos en junio, un máximo desde el inicio de los registros en 1939. Las firmas están recontratando a trabajadores despedidos cuando negocios como restaurantes y gimnasios cerraron a mediados de marzo para frenar el avance del COVID-19.
Pero la reapertura de esos negocios ha llevado a un resurgimiento de las infecciones, concentradas en las regiones del sur y el oeste. Dado que la economía cayó en recesión en febrero, antes de los cierres, algunos negocios están sufriendo una baja demanda, exacerbando una segunda ola de despidos.
(Reporte de Lucia Mutikani. Editado en español por Janisse Huambachano)
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