Florida estableció este domingo un récord en Estados Unidos con 15 300 nuevos casos de coronavirus para un día, disparando las alarmas de las autoridades estatales y locales ante el imparable paso de la pandemia.
La cifra dada a conocer en la mañana de este domingo refleja lo acontecido en la jarnada anterior hasta la medianoche, y eleva los contagios confirmados en el estado a 269 811.
Se trata de la mayor cifra de infecciones en 24 horas desde que estalló la crisis del COVID-19 en marzo y la más elevada para una región en la historia de pandemia en la nación americana. Ni siquiera el estado de Nueva York se acercó a este pico en su momento de máxima expansión del virus el pasado 4 de abril, cuando se reportaron 12 274 contagios.
Las estadísticas reveladas por el Departamento de Salud de Florida superaron el récord de casos en un día establecido el sábado 4 de julio, cuando se registraron en el estado 11 458 contagios adicionales.
El panorama de la enfermedad en Florida generó alta preocupación entre las autoridades gobernamentales y abrió la posiblidad de que el estado vuelva a decretar la vuelta a una fase de confinamiento total de la población y cierre de las instalaciones comerciales en medio de la precaria normalización en marcha.
El número de personas que fallecieron por coronavirus en Florida también subió en 45 decesos el sábado, para un total de 4 242 residentes y otros 104 no residentes, según las autoridades sanitarias estatales.
Las autoridades sanitarias continúan sin hacer públicas las cifras de personas recuperadas del COVID-19.
Miami-Dade sigue siendo el condado con más casos positivos de coronavirus en Florida y toda la zona sur del estado, lo que lo convierte en un epicentro mundial de la pandemia.
En Miami-Dade hay un acumulado total de 64 444 casos (3 576 más que el día anterior) y 1 139 muertes por el COVID-19. Le siguen Broward con 28 253 (1 772 nuevos casos) y 464 fallecidos; y Palm Beach con 21 018 y 606 decesos.
La cifra de hospitalizados por el COVID-19 es de 18 271 pacientes, según la referida fuente.
Desde mediados de junio un estudio pronosticó que Florida se convertiría en uno de los epicentros del coronavirus en Estados Unidos, el país con más casos y muertes por COVID-19.
Según las autoridades locales los aumentos de casos se deben al mayor número de pruebas que se realizan, a las protestas desde junio en el estado contra el racismo y la violencia policial y a las reuniones de jóvenes con motivo de las graduaciones, entre otros factores.
Por su parte, varios políticos critican la reapertura temprana de la economía en Florida cuando todavía no estaba controlado del todo el brote de COVID-19.
En Florida es de uso obligatorio la mascarilla y en ciudades como Miami las multas pueden llegar a los 500 dólares e incluso la cárcel para quienes no cumplen con esa medida desde finales de junio.
Pese a que este viernes el presidente Donald Trump llegó a Miami sin nasobuco, ya el sábado salió en público por primera vez con uno puesto ante las críticas de sus adversarios políticos y la comunidad científica, quienes le pedían dar ejemplo.
Hasta el cierre de esta noticia, en Estados Unidos hay más de tres millones 269 mil casos confirmados de coronavirus, de los cuales se recuperaron 970 000 y fallecieron 134 898 personas, según la Universidad Johns Hopkins.
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