El huracán Douglas azotará a Hawái en las primeras horas de este domingo, según reportó el sábado el Centro Nacional de Huracanes (NHC, por sus siglas en inglés).
De acuerdo al pronóstico del centro, se espera que el fenómeno se debilite gradualmente en las próximas 48 horas, pero antes llevaría vientos y lluvias fuertes a las islas.
El NHC emitió una alerta de huracán para Oahu y el condado de Kauai, incluyendo las islas de Kauai y Niihau, así como un aviso de tormenta tropical y de huracán para los condados de Hawaii y Maui, incluidas las islas de Maui, Lanai, Molokai y Kahoolawe.
“Se esperan condiciones de huracán en Oahu el domingo y en Kauai y Niihau el domingo por la noche, y siguen siendo posibles en todo el condado de Maui y la Isla Grande el domingo. Se esperan condiciones de tormenta tropical en toda la Isla Grande y el condado de Maui a partir de la madrugada del domingo”, precisó el documento.
“La combinación de niveles de agua más altos de lo previsto, peligrosas mareas de tormenta y grandes olas rompientes elevarán los niveles de agua hasta tres pies por encima de las mareas normales cerca del centro de Douglas”, añadió.
A las 11 p.m. HST, el ojo del huracán Douglas estaba situado a unos 390 kilómetros al este de Kahlui y a unos 540 kilómetros al este de Honolulu.
Se desplazaba hacia el oeste-noroeste a unos 16 mph (26 km/h), velocidad que debe mantener en los próximos días.
Tiene vientos máximos sostenidos de cerca de 90 mph (150 km/h) con ráfagas superiores. Sus vientos con fuerza de huracán se extienden hacia afuera hasta 25 millas (35 km) desde el centro, y los vientos con fuerza de tormenta tropical llegan hasta las 105 millas (165 km).
Se prevé que las intensas lluvias afecten a zona de las principales islas de Hawai desde este domingo temprano hasta el lunes. Las precipitaciones pueden provocar inundaciones y deslizamientos de tierra así como rápidas subidas del nivel del agua en pequeños arroyos.
Según un despacho de la agencia Reuters, los residentes de Maui se mostraban este sábado tranquilos frente a la llegada de la tormenta.
La baja afluencia de turistas este año debido a la pandemia del coronavirus ha facilitado el trabajo de los responsables de situaciones de emergencia.
“Si hay algo positivo en esta situación es que hay menos visitantes que contar, menos personas de las que preocuparse”, expresó Chris Sugidono, un funcionario del condado de Maui.
El funcionario explicó que aunque los refugios están adoptando medidas para garantizar el distanciamiento social, la población debe optar en principio por permanecer en sus hogares, salvo quienes estén en una zona de inundación.
Casi la mitad de las personas que han acudido a los refugios son visitantes a quienes se les cancelaron sus vuelos durante huracanes previos, detalló Sugidono.
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