El gobierno cubano suspenderá el transporte privado en La Habana a partir de las 12:00 a.m. del lunes, como medida para frenar la propagación del coronavirus, tras el repunte de casos confirmados en la capital durante las últimas semanas.
José Conesa González, coordinador del Programa de Industria y Transporte del Gobierno de La Habana, mencionó la medida este sábado en el espacio televisivo oficialista Mesa Redonda, donde se refirió a otras determinaciones para la transportación la próxima semana.
También queda prohibida la circulación de carros estatales que no estén debidamente identificados para su circulación. Estos medios pasan el lunes a cumplir funciones destinadas a centros de trabajos en la capital que continúen operando.
Las medidas son similares a las que La Habana estuvo implementando hasta el comienzo de la fase 1 de la desescalada, que se mantuvo sin variaciones debido, justamente, a que la capital continuaba reportando contagios a diferencia del resto del país.
La regulación del transporte privado se suma a la medida anunciada con anterioridad de suspender el transporte público, el cual se mantendría funcionando este sábado y domingo, aunque solo de modo limitado hasta las ocho de la noche.
Eduardo Rodríguez Dávila, ministro cubano de Transporte, dijo que únicamente se mantendrán ómnibus para los trabajadores y la próxima semana se suspenderán las licencias de transportación y las tarjetas de combustibles.
El funcionario explicó que el traslado de apoyo a la salud se verá reforzado, mientras que se fortalecerá el sistema de inspección y habrá un exhaustivo control de los pasajeros que salgan o entren a la ciudad, con puntos de supervisión habilitados para ello.
“Quienes lo hagan deberán portar un autorizo del Consejo de Defensa, pues de lo contrario no serán recibidos en su destino”, advirtió. “El uso de la autorización especial de vehículos estatales se mantiene, así como las operaciones de carga, actividades que garantizan la vitalidad de la economía en la provincia”.
La transportación pública había sido reanudada luego de casi tres meses de verse suspendida por la crisis sanitaria del nuevo coronavirus. Pero los más recientes números ofrecidos por el Ministerio de Salud Pública de Cuba (MINSAP) sobre la situación del virus en el país evidencian una tendencia al incremento y generan preocupación.
“Desde el 21 de julio estamos asistiendo a un número creciente de casos confirmados por días, lo que nos pone en una situación muy complicada”, dijo el ministro de Salud Pública, José Ángel Portal Miranda, en conferencia de prensa este sábado.
Dentro del país, La Habana continúa mostrando las cifras más altas. El más reciente informe del MINSAP indica que hasta el viernes se registraron 59 nuevos casos confirmados de coronavirus, de los cuales 16 pertenecen a la capital.
En los últimos quince días, La Habana acumuló 205 pacientes de COVID-19 y ahora el país reporta un acumulado total de 2 888 desde el inicio de la crisis sanitaria por la pandemia.
Reinaldo García Zapata, gobernador de La Habana, aseguró en el programa Mesa Redonda que el rebrote de coronavirus en la capital cubana ocurrió por negligencia de personas e instituciones.
El funcionario aseguró que existen en la provincia siete eventos de transmisión del virus, tres de ellos en el municipio Habana del Este, dos en La Lisa, uno en Marianao y otro en Playa.
“Se necesita disciplina institucional y ciudadana. De los eventos que estamos trabajando, cuatro fueron institucionales”, precisó. Como respuesta, las autoridades han ordenado el cierre de espacios como las playas y piscinas.
De igual modo, se cerraron parques de diversiones y espacios de concentración de cuentapropistas; mientras que los restaurantes, cafeterías y bares solo venderán comida para llevar u ofrecerán el servicio de entrega a domicilio. La venta de ron a granel también se paraliza, para evitar las aglomeraciones en las bodegas.
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