El cubano Osmany Estopiñán Vázquez, residente en Argentina, se ha convertido en el mayor donante de plasma de la provincia donde reside para atender a pacientes con coronavirus en ese país.
Con 50 años de edad este empresario radicado en Carlos Paz, al oeste de Córdoba, hizo en marzo un viaje a Miami y al regresar a Buenos Aires dio positivo con COVID-19, contó Perfil en su portal web.
Luego de eso, Estopiñán Vázquez necesitó ingresar en el hospital con asistencia respiratoria mecánica. Al salir de peligro y recibir el alta médica juró ayudar a las personas enfermas de coronavirus con la donación de su plasma, ya que que tiene altos niveles de titulación, un término técnico que define la calidad del mismo.
Cada 15 días realiza la donación de plasma y en solo 30 minutos sabe que puede ayudar a alguien que lo necesita.
“Una señora de 99 años estaba muy mal y tras la colocación del plasma que había donado, al otro día se levantó de la cama. Cuando me llegó esta historia me emocioné mucho y considero que sería hermoso algún día poder reunirme con esta mujer”, comentó el cubano a Perfil.
Este cubano también es un emprendedor, ya que administra los restaurantes de comida de la isla Oye chico. Antes de la pandemia tenía tres, pero con la situación que ha generado la pandemia se vio obligado a cerrar uno de ellos.
"No hubo forma de levantarlo, ni tampoco hubo voluntad de los propietarios del local. Nunca habíamos incumplido”, dijo.
Desde la intimidad de su hogar comparte con la familia que ha construido en Argentina la dicha de estar vivo y de sentirse útil.
"Mientras los doctores digan que las proteínas andan bien y los parámetros de anticuerpos están óptimos para lo que ellos necesitan voy a seguir donando", dijo a un reporte de la televisión cubana difundido este martes.
En Argentina el número de casos positivos de COVID-19 supera los 408 mil y hasta este lunes se registraban 8 mil 857 muertes, según datos oficiales.
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