Los vecinos del municipio San Juan y Martínez, de la provincia Pinar del Río, hicieron cola durante horas y bajo una fuerte lluvia para poder comprar alimentos en una tienda recaudadora de divisas.
Un vídeo compartido por Radio República en la plataforma YouTube, muestra durante dos minutos cómo las personas congregadas para hacer la compra no cejan en su empeño a pesar de la inclemencia del clima.
Llovía tanto en San Juan y Martínez que la calle se inundó y el agua llegaba a la altura del tobillo de las personas, cubriendo los zapatos y dejando los pies húmedos y fríos.
En la grabación se escuchan las voces de ciudadanos que observan la cola y comentan que el origen de esta fue la demora de los trabajadores de la tienda para despachar la mercancía.
La cantidad de gente era tal que obstruían el paso de una guagua y aunque el vehículo tocaba el claxon las personas no se quitaban del camino con sus paraguas. Amontonados unos sobre otros seguían en su cola con un único objetivo en mente: comprar aceite y pollo.
Al ver a una persona que se cansa de la cola y se aleja del tumulto con su paraguas y la cabeza gacha, otra cubana que mira saca conclusiones rápidas: "ese no cogió ticket".
El estado cubano ha emprendido una cruzada contra los coleros y acaparadores en todo el país. A estas personas las responsabiliza del desabastecimiento que sufren las tiendas.
Hace solo una semana se vio una cola similar en Santiago de Cuba con decenas de personas bajo la lluvia y el objetivo era el mismo, comprar alimentos y artículos de primera necesidad. Los santiagueros se aglomeraron y ni siquiera la fuerte lluvia les hizo desistir de su intención de compra.
La situación de las colas para adquirir alimentos, en particular cárnicos en Cuba, ha llegado al punto de generar burlas entre los cubanos, quizás para restarle peso a la dura connotación que tiene este hecho de ver centenares de personas cada día luchando por llevar comida a la mesa.
Tras el paso de la Tormenta Tropical Laura unos jóvenes cubanos grabaron un vídeo cómico en que un hombre al escuchar la frase "Corre, que llegó el pollo", sale corriendo por una calle inundada con una jaba en la mano y una careta de buceo, gritando que él era el uno en la cola.
Las lluvias ayer en San Juan y Martínez dejaron un escenario similar, de gente corriendo, calles inundadas y colas para el pollo, pero un escenario de muy poca gracia.
Ver imágenes como estas conducen inevitablemente a pensar en la situación epidemiológica en Cuba. En esta jornada se reportaron tres defunciones por la COVID-19 y 61 nuevos diagnósticos positivos por coronavirus, de ellos 2 en Pinar del Río.
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