La Policía de Miami Beach desmanteló una red de tráfico humano en la ciudad que además se dedicaba a la venta de drogas y la prostitución, informó este sábado la prensa local.
El canal Telemundo 51 reveló que la investigación, que duró dos semanas, dio con un grupo delictivo que se dedicaba a negocios criminales con drogas, armas y prostitución.
Fueron detenidas en la redada al menos siete personas, que ya se presentaron a los tribunales.
Cinco de las ellas están relacionadas al tráfico humano, pero también recibieron cargos por posesión de armas y venta de narcóticos como cocaína, crack y metanfetaminas.
Durante el operativo los agentes rescataron a una víctima de tráfico humano, la cual aseguró que era prostituida a cambio de drogas y bajo amenazas.
Dijo que un proxeneta le suministraba cocaína, y si no hacía lo que quería, la amenazaba con darle una paliza.
Según el reporte, las autoridades llevaban 15 días vigilando dos apartamentos en Jefferson Avenue, donde se había reportado actividad sospechosa.
En las últimas semanas se ha incrementado la violencia en Miami Beach por lo que las autoridades locales han debido incrementar las medidas de seguridad con vista a las vacaciones de primavera.
A raíz del auge de hechos delictivos la policía de la ciudad ha decomisado pistolas y rifles de asalto, drogas y dinero en efectivo en las últimas fechas, como parte de los operativos para frenar la inseguridad.
Se ha informado de otros arrestos a individuos portando armas y drogas como parte de un plan de seguridad que emprenden las autoridades para evitar que se sigan presentando hechos lamentables en la zona.
La ciudad, un importante destino turístico de Florida, ha sido el escenario de una serie de incidentes violentos que incluyen tiroteos, peleas y apuñalamientos, ante lo cual los residentes de la urbe pidieron medidas más enérgicas, como una mayor presencia policial en las calles.
Las autoridades locales apuntan que la mayor parte de la violencia parece ser causada por forasteros que acuden a la ciudad para tratar de escapar de las restricciones relacionadas con la pandemia del coronavirus en sus lugares de origen.
A inicios de febrero una mujer de 20 años, de Pensilvania, fue apuñalada a plena luz del día por otra en una pelea cerca de la calle 13 y la avenida Collins, en South Beach. La joven recibió heridas en la cabeza, el cuello y los brazos, por lo que debió ser atendida en el Jackson Memorial Hospital.
A fines de enero un tiroteo en la Avenida Washington y Calle 8 dejó un saldo de 3 muertos, mientras que dos semanas después el mismo sitio fue testigo de una pelea entre jóvenes de Chicago y custodios de un restaurante local.
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