El médico cubano Johan Pérez Leyva lamentó este martes que las personas en la isla denunciaran los problemas del país en redes sociales, pero no emprendieran ninguna acción para lograr cambios o mejoras.
“¿Hasta cuándo vamos a esperar!!!? Nos estamos adaptando a denunciar en las redes sociales lo malhecho, lo que todo el mundo ya conoce… ¿Y qué? ¿Hemos visto el cambio?”, escribió en Facebook.
“Mientras seguimos esperando un milagro la comida sigue escaseando, los medicamentos siguen desapareciendo, vivimos una guerra constante por nuestra sobrevivencia y la de nuestros hijos desde el momento en que abrimos los ojos cada mañana”, expresó.
El galeno aseguró también que “solo un masoquista se adapta a este sistema”. “Siguen reprimiendo, continúan creciendo las leyes y medidas estúpidas dictadas por quienes no sufren esta miseria”, agregó.
Seguidamente, Pérez se pregunta si su pueblo acaso no quiere “ver las tiendas llenas de comida”. En un mensaje directo a los cubanos, dice: “¿No te ilusiona la idea de que hay solución para tus problemas de salud? ¿No quieres ver a los niños de tu familia siendo felices? imagina tu país sin colas, con transporte, con libertad. Nos están matando lentamente. Se están burlando de nuestra inteligencia”.
Pérez concluye su publicación pidiendo que cese el hambre, la represión y las mentiras, al tiempo que exige a sus compatriotas reclamar sus derechos. “¡Patria y vida para mi Cuba!”, expresa.
De continuo, el galeno denuncia en redes sociales situaciones relacionadas con las dificultades de los cubanos y el deterioro del sistema de salud en el país. A mediados de marzo, expuso la mala calidad de la comida que se brindaba a los pacientes con coronavirus en el centro de aislamiento de la escuela vocacional Lenin.
Apenas días antes, revelaba el caso de una niña de nueve años de Las Tunas, hija de un amigo suyo, cuya condición física se agravaba mientras esperaba un trasplante de médula que su padre podría donarle, pero no lo hacía por irregularidades y tardanzas en los hospitales.
A finales de febrero, Pérez dijo que la Seguridad del Estado estaba vigilando su consultorio médico en Las Tunas. Ese mismo mes, la policía política ya había citado al médico a una de sus “entrevistas” luego de que el joven pidiera ayuda en redes sociales para un paciente que padecía una discapacidad y enfrentaba muchas necesidades económicas.
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