La Junta Escolar del condado de Miami-Dade, en el sureste de Florida, votó este miércoles para aprobar la obligatoriedad de usar mascarilla dentro de las instalaciones cuando comience el nuevo curso escolar la próxima semana.
La decisión fue aprobada 7-1 en la reunión, creando para el cuarto mayor distrito escolar de EE.UU. una política similar a la diseñada en los vecinos condados de Broward y Alachua cuyo objetivo es proteger a los estudiantes y profesores contra COVID-19 ante el "alarmante" repunte de la epidemia en el estado.
Durante la reunión, se ultimaron los detalles de los lineamientos y protocolos para el retorno de los estudiantes a las aulas.
La política permite una exención médica, pero desafía la orden del gobernador Ron DeSantis contra la mascarilla obligatoria.
Lubby Navarro fue el único miembro de la junta escolar de Miami-Dade que votó en contra de la medida. Christi Fraga, miembro de la junta, no estuvo presente.
Mientras se desarrollaba la reunión, grupos de padres de familia se manifestaron fuera del local, unos a favor del uso obligatorio de las mascarillas, y otros en contra.
El superintendente de las escuelas públicas del condado de Miami-Dade, Alberto Carvalho, recomendó la mascarilla obligatoria a pesar de la oposición del estado.
“Esta no es una declaración política. Esta es una herramienta de protección", dijo Carvalho.
Horas antes, la autoridad estatal de Educación de Florida anunció que podría “remover” a funcionarios de autoridades escolares, electos por el pueblo, que no acaten la orden del gobernador, Ron DeSantis, que limita el uso de mascarillas contra el COVID en las escuelas a la voluntad de los padres.
Broward, que ya aprobó la misma medida, dijo que tuvo un primer día de clases sin problemas, con solo un estudiante y un maestro del distrito que se negaron a usar mascarilla.
Miami-Dade escuchó comentarios públicos de miembros de la comunidad que defendieron opiniones contrapuestas sobre el tema el miércoles.
Carvalho criticó la reunión del martes en la que la junta de educación estatal reprendió a los superintendentes de los condados de Broward y Alachua por imponer sus políticas y desafiar las órdenes de DeSantis. Algunos funcionarios amenazaron con retener los salarios de los superintendentes y miembros de la junta escolar tanto en Broward como en Miami-Dade.
Carvalho dijo que la realidad del aumento de COVID-19 en el sur de Florida exige una política más protectora por parte de los líderes educativos.
"Si la consecuencia en cualquier momento de mi carrera es una amenaza para mi propio puesto, está bien", agregó.
Florida se ha convertido en el escenario de una controversia pública sobre el uso de la mascarilla.
Las escuelas de Pasco, Hernando, Pinellas, Polk, Sarasota y Citrus han decidido hacer opcional el uso de máscaras, mientras que el distrito escolar de Hillsborough determinó implementar un mandato de nasobucos para todos los alumnos y empleados.
Pero debido a la orden ejecutiva del gobernador Ron DeSantis, los padres pueden optar por que sus hijos no usen una mascarilla aunque la junta directiva de su distrito escolar lo recomiende.
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