El Gobierno de Estados Unidos autoriza que ciudadanos de ese país y organizaciones religiosas ofrezcan ayudas de medicamentos, alimentos y equipos médicos durante la actual crisis económica y sanitaria que vive la isla, agudizada por la pandemia del coronavirus.
“Tenemos muchas opciones para acelerar el flujo de alimentos, medicinas y otros bienes humanitarios a Cuba a través de los Departamentos de Comercio, Tesoro y Transporte. Estados Unidos apoya al pueblo cubano”, dijo a través de Twitter Brian A. Nichols, subsecretario de Asuntos del Hemisferio Occidental del Departamento de Estado.
Nichols aseguró en otro mensaje la Casa Blanca está dispuesta a apoyar a quienes deseen enviar ayudas humanitarias a la Cuba, algo en lo que colaboran otros ciudadanos estadounidenses.
“Este ha sido y seguirá siendo nuestro compromiso y nuestra política”, aseveró el diplomático.
El Departamento de Estado, a través de la plataforma digital Share America, compartió un mensaje sobre las ayudas que envían los estadounidenses a Cuba, tras ser aprobadas por el Gobierno.
Estos envíos no son solo de medicinas y equipos sanitarios, vendidos o donados, para el tratamiento de personas cubanas, sino también, artículos de telecomunicaciones, a menos que resulten prohibidos por funcionarios de la isla o miembros de rango del Partido Comunista.
“La actual pandemia de COVID-19 hace aún más importante que estos artículos lleguen rápidamente al pueblo cubano. El Departamento de Estado ayuda colaborando con las ONG y empresas del sector privado para acelerar la exportación de productos básicos y equipos médicos como jeringuillas, equipos de protección personal y alimentos muy necesarios” dijeron.
Como parte de estas ayudas se aprobó que dos compañías aéreas privadas de vuelos chárter entreguen más de 2,7 toneladas métricas de paquetes de asistencia a ciudades de toda Cuba.
La prestación de asistencia humanitaria a Cuba es posible gracias a que la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) mantiene varias autorizaciones de licencias generales.
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