El periodista cubano Waldo Fernández, redactor del medio independiente Diario de Cuba, fue aceptado en el nuevo programa de acogida en Madrid de periodistas de América Latina que promueve la organización no gubernamental (ONG) Reporteros Sin Fronteras (RSF) y que cuenta con el respaldo económico del Ayuntamiento de la capital española.
La delegación española de RSF eligió al periodista independiente cubano, junto a otros tres colegas latinoamericanos: el periodista Óscar Javier Parra, director del portal periodístico Rutas del Conflicto, la periodista de investigación mexicana María Teresa Montaño y una periodista nicaragüense que prefiere mantener su anonimato por razones de seguridad.
Una nota de prensa aparecida este jueves en el portal del Colegio de Periodistas de Andalucía en Almería explicó que el programa brinda a los periodistas un paréntesis de tres meses alejados de un contexto de peligro y alto estrés, ofreciendo una estancia en Madrid con gastos de alojamiento y manutención incluidos.
El objetivo, señaló, es ampliar la formación de los beneficiarios a través de cursos en los que adquieran nuevas capacidades profesionales. El patrocinio del ayuntamiento madrileño ofrece las condiciones para que los periodistas que desarrollan su labor en medio de presiones y amenazas puedan alejarse de sus entornos hostiles y desconectar en la capital española, donde recibirán apoyo psicológico y formación.
Asimismo, los profesionales seleccionados “tendrán la oportunidad de compartir en medios y universidades sus experiencias como periodistas que trabajan en algunos de los contextos más peligrosos del mundo: perseguidos, amenazados por grupos criminales y, a veces, abandonados por Estados que se desentienden de su seguridad”.
Originario de Bogotá, el periodista Óscar Javier Parra ha recibido importantes premios, como el Data Journalism Award (2017). El análisis de las masacres cometidas en Colombia le ha supuesto la apertura de procesos judiciales y amenazas por parte del Ejército.
Tras ser corresponsal para los principales medios nacionales mexicanos, María Teresa Montaño fue despedida por presiones del gobierno del Estado de México (Ciudad de México) por publicaciones que revelaron los excesos de la clase gobernante y sus abusos de poder. Además, es fundadora de los dos primeros medios en su provincia dedicados al periodismo de investigación, transparencia y fact-checking.
Por su parte, Waldo Fernández ha sufrido las amenazas de la Seguridad del Estado por publicar artículos de denuncia sobre la inexistente libertad de prensa en el país. Las autoridades cubanas consideran ilegal su trabajo y amenazan con procesarlo.
En una de sus últimas colaboraciones, el periodista entrevistó a la activista Thais Mailén Franco tras su liberación luego de casi 5 meses detenida por participar en la protesta del 30 de abril en la calle Obispo. “No podrán callarme”, aseguró la joven que se encuentra en libertad "bajo una medida cautelar", a la espera de sanción.
La elección de Fernández y sus tres colegas de profesión se realizó entre medio centenar de candidaturas para el Programa de Acogida Temporal de RSF, en razón de su alto perfil profesional y por la severidad de las amenazas a su seguridad.
Proteger a los periodistas, especialmente aquellos que están más expuestos al riesgo por trabajar sobre el terreno, es uno de los pilares de la misión de Reporteros Sin Fronteras. La estancia en Madrid, entre principios de octubre y finales de diciembre, les ayudará a recuperar la calma, según consideraron periodistas participantes en fases anteriores.
Para RSF, este programa es “la encarnación más elocuente de lo que significa la libertad de prensa y la muestra de las condiciones demasiado a menudo tan difíciles en que deben desempeñar su búsqueda de la verdad muchos de nuestros colegas en América Latina”, señaló el presidente de la sección española, Alfonso Armada, quien subrayó que, en América Latina, la violencia contra los periodistas es una de las principales amenazas para la libertad de prensa.
Gracias a la aportación del Ayuntamiento de Madrid, que ha renovado cada año el programa desde 2018, periodistas que sufren amenazas y ataques violentos por hacer su trabajo pueden aliviar por un tiempo una situación de alta tensión. La dotación cubre el viaje, el alojamiento, la manutención, transporte, trámites, seguro médico, apoyo psicológico, cursos de formación y, en esta edición, las pruebas PCR necesarias para subir al avión y desembarcar en España.
Los periodistas participantes en el programa estarán disponibles para participar en medios de comunicación, charlas en universidades, conferencias y otros foros, en la medida de sus posibilidades y teniendo en cuenta las actividades de formación programadas.
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