El gobernante cubano Miguel Díaz-Canel arremetió este miércoles contra la marcha cívica del 15 de noviembre, convocada por la plataforma Archipiélago, insistiendo en que está vinculada con supuestos intereses de Estados Unidos de poner fin al régimen de La Habana.
“No vamos a legitimar el accionar imperialista en la política interna, ni dar cauce a los deseos de restauración neocolonial que han acumulado algunos y que se refuerzan en situación de crisis”, advirtió Díaz-Canel en redes sociales.
“No es un acto de civismo, es un acto de subordinación a la hegemonía yanqui”, concluye su publicación, donde cita además las palabras de Rogelio Polanco, jefe del Departamento Ideológico del Partido Comunista de Cuba (PCC), quien dijo que la manifestación “nunca fue auténtica”.
Varios usuarios expresaron de inmediato su indignación ante las palabras del gobernante. “Sí, sí....cómo no?! Todo es pagado por USA, la miseria que se ve en el país y los refrigeradores vacíos del pueblo cubano también es patraña del imperio”, dijo uno.
“Es verdad que todo es culpa de los del norte, fíjate que los de aquí del sur los de esta islita alargada y estrecha no tenemos dinero ni para poder comprar un chupa chupa en tiendas que venden en MLC y los del norte que sí tienen dinero y mandan dinero a algunos de aquí del sur sin los únicos que van compran en esas tiendas en MLC y luego nos revenden los productos a los pobres del Sur, que para poder comprar un par de zapatos tenemos que empeñarnos un año. Sí, es verdad, los del Norte son los culpables”, comentó otro con sarcasmo.
“No culpen más a nadie, por favor, es el pueblo quien lo pide y quien lo quiere, cuándo lo van a entender, seguro que la gente quiere caer preso para darle el gusto a otra gente, porque eso es lo que hacen aquí, meter preso por pensar diferente”, denunció una tercera internauta.
La víspera, Polanco aseguraba que los promotores de la marcha seguían “el libreto yanqui”. “Cumplen sus órdenes, se rodean de violentos y terroristas, y sueñan con ejecutar sus acciones desestabilizadoras con impunidad”, sostuvo.
“Las proyecciones públicas de los promotores y sus vínculos con organizaciones subversivas o agencias financiadas por el gobierno de Estados Unidos, tienen la intención manifiesta de promover un cambio de sistema político en Cuba, por lo que la marcha anunciada constituye una provocación como parte de la estrategia de cambio de régimen ensayada por EE.UU. en otros países”, aseguró.
El mismo día, Archipiélago publicó una carta abierta dirigida a Díaz-Canel, en la que el grupo se desmarca de las acusaciones del régimen de La Habana sobre propósitos “desestabilizadores” en la convocatoria.
“Se nos acusa de intentar desestabilizar el país, sin embargo, el que ha desestabilizando el país es usted”, dice la misiva, refiriéndose a la gestión del gobernante cubano.
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