Cubanos residentes en el exterior y en la isla gestionaron los medicamentos que necesita el pequeño Erick Yadiel, residente en Cienfuegos, para tratar una enfermedad que se conoce como trombocitopenia, que le provoca sangrientos por la nariz.
El proyecto Sembrando Esperanzas lanzó una alerta en Facebook hace solo dos días, para convocar a quienes pudieran ayudar a conseguir una serie de medicamentos escasos en Cuba y que son imprescindibles para que el menor mejore su calidad de vida.
"Es un niño que por esa enfermedad no sube de peso. En nombre de su mamá pedimos ayuda humanitaria", escribieron en la red social.
No tardaron en responder personas dispuestas a donar los medicamentos que necesita el menor, de siete años, incluidos aquellos que están en falta en la red de farmacias estatales de Cuba.
CiberCuba contactó con una de las coordinadoras del proyecto, quien afirmó que los medicamentos que aliviarán las dolencias del pequeño, fundamentalmente el ácido tranexámico, ya fue localizado en la red de colaboradores y se lo harán llegar lo más pronto posible.
"Los mismos cubanos dentro de la isla nos escriben y nos hacen llegar medicamentos o directamente los mandan a los familiares", explicó la fuente a través de un comunicado.
La trombocitopenia es una afección en la que el organismo cuenta con pocas plaquetas, las células sanguíneas que intervienen en la coagulación de la sangre y puede provocar epistaxis, que no es más que el sangramiento nasal.
Sembrando Esperanzas es una organización no gubernamental sin fines de lucro que ofrece ayuda a niños cubanos. "Un proyecto lleno de amor y empatía", dicen en su página de Facebook.
Reciben diariamente cientos de mensajes de texto pidiendo ayuda para pequeños con disímiles dolencias y ante la falta de fármacos en Cuba el trabajo se hace cada día más intenso.
Los interesados en ayudar pueden hacerlo a través de un grupo de WhatsApp que se creó para tales fines y al que pueden ingresar a través de este enlace.
El proyecto fue uno de los primeros que organizó ayuda para un bebé abandonado en La Habana, el cual recibió atención en el Cardiocentro Pediátrico William Soler.
Sin embargo, suspendieron temporalmente la ayuda porque una de las enfermeras de ese centro de salud dijo públicamente que el infante no necesitaba nada.
"Les pido que nos dejen ayudar, ese niño va a necesitar leche, ropa de frío y cosas de diferentes etapas, porque ahora tiene canastilla, pero necesitará ropa para los próximos años", dijo una de las representantes de Sembrando Esperanzas.
El mensaje, que se transmitió también a las autoridades cubanas, sirvió para movilizar opiniones sobre un tema muy sensible y que conmocionó a todo el país, porque se trató de un bebé de apenas cuatro meses de nacido.
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