La Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ACNUDH, por sus siglas en inglés) reportó este sábado 579 muertes de civiles y 1,002 heridos en Ucrania, desde el comienzo de la invasión militar de Rusia a ese país.
Del total de víctimas mortales, 110 son hombres, 75 son mujeres y 42 son niñas y niños; pero falta por identificar el género de 352 personas adultas. Además, entre los heridos, hay 54 niñas y niños.
"La mayoría de las bajas civiles registradas fueron causadas por el uso de armas explosivas con una amplia área de impacto, incluido el bombardeo de artillería pesada y sistemas de lanzamiento de cohetes múltiples, y ataques aéreos y con misiles", alertó la plataforma internacional en su comunicado.
Sin embargo, ACNUDH indicó que las cifras reales son considerablemente más altas, sobre todo en el territorio controlado por el gobierno de Volodimir Zelenski, debido a que se ha retrasado la recepción de datos en algunos lugares donde se han producido intensas hostilidades y muchos informes están pendientes de corroboración.
"Esto afecta, por ejemplo, a Izium (región de Kharkiv) y Mariupol y Volnovakha (región de Donetsk), donde hay denuncias de cientos de víctimas civiles. Estas cifras se están corroborando aún más y no están incluidas en las estadísticas anteriores", precisó.
Según la Oficina del Fiscal General de Ucrania, hasta las 10 de la mañana (hora local) del 12 de marzo, 79 niños habían muerto y más de 100 habían resultado heridos.
Liz Throssell, portavoz del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, expresó este viernes su preocupación "por el aumento del número de muertos y el sufrimiento humano en Ucrania y pedimos el fin inmediato de los ataques".
"Los civiles están siendo asesinados y mutilados en lo que parecen ser ataques indiscriminados, con las fuerzas rusas usando armas explosivas con efectos de área amplia en o cerca de áreas pobladas. Estos incluyen misiles, proyectiles de artillería pesada y cohetes, así como ataques aéreos. Escuelas, hospitales y jardines de infancia se han visto afectados, con consecuencias enormemente devastadoras", aseguró Throssell.
El pasado 3 de marzo, 47 civiles murieron cuando fuerzas aéreas rusas atacaron dos escuelas y varios bloques de apartamentos en Chernihiv. Días después, el 9 de marzo, otro ataque aéreo ruso golpeó el Hospital No.3 de Mariupol y dejó al menos 17 civiles heridos.
"Todavía estamos investigando los informes de que al menos tres civiles pueden haber muerto en el ataque aéreo. Hablamos con diferentes fuentes en Mariupol, incluidas las autoridades locales, que indicaron constantemente que el hospital estaba claramente identificable y operativo cuando fue atacado", explicó la funcionaria.
Asimismo, Naciones Unidas afirmó que han recibido "informes fidedignos de varios casos de fuerzas rusas que utilizan municiones en racimo, incluso en zonas pobladas" y puso un ejemplo de un ataque del 24 de febrero, cuando una munición en racimo explotó en el Hospital de la Ciudad Central en Vuhledar, en Donetsk, territorio controlado por el gobierno, y cuatro civiles murieron y diez quedaron heridos.
"Debido a sus efectos de área amplia, el uso de municiones en racimo en áreas pobladas es incompatible con los principios del derecho internacional humanitario que rigen la conducción de las hostilidades", recordó Throssell.
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