Más de 15 mil ciudadanos rusos han sido detenidos desde el pasado febrero en diferentes ciudades de Rusia por protestar contra la guerra en Ucrania.
Según los datos ofrecidos por el proyecto mediático independiente de derechos humanos, OVD-Info, desde que comenzara la invasión de Rusia a Ucrania miles de rusos han sido víctimas de persecución política en todo el país por manifestar su rechazo al conflicto bélico desatado por Vladimir Putin.
Este sábado, más de 200 personas fueron detenidas en 17 ciudades rusas. Solo en Moscú y San Petersburgo se registraron cifras de arrestos superiores a las 80 personas, refiere el proyecto independiente ruso.
Una sentada contra la intervención militar de Putin en Ucrania estaba prevista para este 2 de abril en el parque Zariadié, cerca del Kremlin, pero la policía comenzó a arrestar a todas las personas que estaban sentadas en el lugar, refirió la agencia de noticias AFP.
Alrededor del parque, la policía rusa desplegó más de 30 furgonetas para detener a los manifestantes que habían sido convocados a través de las redes sociales.
Los disidentes se enfrentaban a multas y posibles penas de prisión por salir a la calle a expresar su oposición a la guerra.
OVD-Info, que aboga además por la libertad de reunión y otros derechos políticos básicos, relató que en Moscú "un hombre fue arrestado por una protesta de una sola persona en la que estaba de pie sosteniendo un paquete de carne en rodajas de la compañía 'Miratorg'. Tachó las últimas cinco letras en el nombre de la compañía para dejar solo la palabra 'mir' [que significa paz]. Parece que esta palabra ahora está prohibida en Rusia".
El sitio de esta ONG denunció también que en las comisarías de San Petersburgo y Moscú se les negó la entrada a los abogados para ver a sus clientes. "Las personas fueron citadas por participar en protestas no autorizadas por el estado, lo cual es una violación según el Código Administrativo", dijo.
Durante los últimos meses se han reportado, además, operaciones de registro contra activistas y periodistas independientes en varias ciudades, muchos han sido interrogados y se les han confiscado sus computadoras y teléfonos. En San Petersburgo, una reportera fue atacada por cadetes de la academia militar, acompañados por un oficial, porque estaba filmando una protesta, publicó ese medio.
La sociedad civil rusa que se opone abiertamente a la invasión a Ucrania ha sido víctima de despidos de sus centros laborales, amenazas, acoso, censura, y aquellos que se manifiestan en las calles pueden ser llevados ante tribunales penales.
Varios medios independientes fueron bloqueados y otros medios de comunicación dejaron de trabajar o se negaron a cubrir la guerra debido a "la adopción de una ley que prevé una pena de prisión de hasta 15 años por difundir información falsa sobre las acciones de las fuerzas armadas rusas", añadió OVD-Info.
En contraste a la represión del gobierno ruso, los medios estatales difunden imágenes donde se ven decenas de personas apoyando a los soldados rusos que participan en la mal llamada "operación militar especial", reportó Yahoo Noticias.
Apenas 10 días después de iniciada la invasión de Rusia a Ucrania ya se registraban más de 3,500 personas detenidas por protestar contra la agresión al pueblo ucraniano y el gobierno ruso avisaba a la población que serían castigados con penas de cárcel por lanzarse a las calles.
A inicios de marzo la policía rusa llegó a arrestar a cinco niños de entre 7 y 11 años por manifestarse pacíficamente en contra de la invasión a Ucrania, cuando acudían con sus madres a poner flores frente a la embajada ucraniana en Moscú.
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