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Condenan a cinco años de trabajo con internamiento a adolescente cubano del 11J

“Con esto que están haciendo no están recuperando a los jóvenes, están destruyendo familias, a madres… Me ilusionaron a mí, que empecé hace unos días con mi carrera… están jugando con los sentimientos de mi familia y con los míos”, indicó el joven en una grabación.


Este artículo es de hace 1 año

El adolescente Marco Antonio Pintueles Marrero, preso político del 11J recientemente excarcelado, denunció la condena impuesta por los tribunales de Holguín de cinco años de trabajo con internamiento por su participación en las históricas protestas.

Pintueles Marrero, sentenciado en febrero a siete años de privación de libertad por haberse manifestado pacíficamente el 11 de julio en esa ciudad, recibió una comunicación este 2 de junio, en la que las autoridades judiciales le informan que tiene que cumplir 5 años de trabajo correccional con internamiento.

En un video enviado a esta redacción, el joven -que pasó nueve meses en prisión siendo el único menor de edad preso en Holguín-, denunció lo que consideró una injusticia, pues nunca se le notificó que habría semejante cambio de medidas tras su excarcelación.

Excarcelado a finales de abril, el adolescente y sus familiares consideraron que las autoridades le concedían la libertad luego de pasar nueve meses encarcelado y tras haber mostrado su inconformidad con su situación de prisión durante la vista oral del recurso de casación ante los jueces del Tribunal Provincial Popular.

Pintueles dijo no entender por qué a todos los jóvenes de 18 años y menores les habían dado la oportunidad de seguir sus estudios y de reinsertarse a la sociedad y a él no, aseguraron familiares de los acusados presentes en la sala.

Tras su puesta en “libertad”, familiares del joven reconocieron que desconocían en qué condiciones. “No lo puedo creer, primero dijeron que era un pase, luego nos informaron que lo habían liberado”, dijo un familiar a CiberCuba.

Ahora, una vez recibida la notificación sobre la condena de trabajo con internamiento en un correccional, el joven asegura que será como seguir en prisión. “Voy a seguir preso, en otras condiciones, pero preso”, dijo en el video enviado este martes a esta redacción.

“De siete que fueron procesados por la causa del 11J, voy a ser el único menor que irá preso en Holguín”, aseguró Pintueles Marrero, denunciando que los otros jóvenes que fueron procesados por manifestarse tienen familia vinculada al régimen, “padres del MININT” o influencias; y que “por eso están libres, gracias a Dios”.

Uno de esos jóvenes, Yoel Ricardo Sánchez Borjas, de la misma edad y sentenciado por la misma cantidad de años que Pintueles Marrero, se encuentra bajo fianza desde el primer momento y no ha tenido que pasar los rigores de la cárcel como su par, según confirmaron en abril varias fuentes a esta redacción.

A raíz de la situación de su hijo, Dairy Marrero, denunció que el estudiante había sido detenido violentamente el 11 de julio y que se encontraba en delicado estado de salud en la cárcel. Al adolescente le habían provocado “un hematoma muy grande en la espalda”.

“De eso le tiraron fotos en Instrucción Penal”, donde estuvo 46 días incomunicado y se contagió con COVID-19, afirmó entonces. En declaraciones a Radio Martí, la madre denunció que a su hijo lo habían obligado a confesar haber cometido vandalismo contra poster del Partido Comunista de Cuba (PCC) en Holguín

“Mi hijo es un adolescente de 18 años muy manejable y el instructor le decía ‘mira, tu mamá está allá afuera, está sufriendo, coopera con el proceso’… y reconoció, bajo esa coacción, haber tirado piedras a un póster del Partido”, denunció Marrero.

Pintueles Marrero, quien se encontraba cursando estudios de técnico medio superior en la Escuela de Economía de Holguín y no le constaban antecedentes penales al momento de su detención, denuncia ahora la injusticia que se vuelve a cometer en su caso, con la nueva medida de trabajo con internamiento en un correccional.

“Con esto que están haciendo no están recuperando a los jóvenes, están destruyendo familias, a madres… Me ilusionaron a mí, que empecé hace unos días con mi carrera… están jugando con los sentimientos de mi familia y con los míos”, indicó el joven en su grabación.

Acusado inicialmente del presunto delito de “sedición”, la fiscalía solicitó en un primer momento 18 años de prisión, la misma cantidad de años de vida del joven.

Además, solicitó que pagara cuotas superiores a 23,500 pesos por supuestos daños materiales al Partido, al vecino Complejo Monumentario de Plaza de la Revolución y a un vehículo de la Brigada Especial del Ministerio del Interior (MININT), de acuerdo con el expediente colectivo en fase preparatoria consultado por CiberCuba.

“A partir de ahora, lo que pueda pasarme allá dentro será culpa y responsabilidad del mayor Sergio de la Seguridad del Estado del Holguín y del teniente coronel Camejo. Ellos dos son los que se encargan de los presos políticos del 11 de julio”, avisó el joven en su grabación.

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