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Depredador sexual sentenciado a diez años en prisión por intento de seducción a una menor

Zachary S. Spiegel, de 38 años y residente en Jensen Beach fue procesado por el Proyecto Infancia Segura, del Departamento de Justicia de EE. UU.

Hombre detenido (imagen de referencia) © Pixabay
Hombre detenido (imagen de referencia) Foto © Pixabay

Este artículo es de hace 1 año

Un depredador sexual fue sentenciado por el Tribunal Federal del Distrito Sur de Florida a diez años en prisión por el intento de seducción a una menor de 14 años, según autoridades de ese estado.

Zachary S. Spiegel, de 38 años y residente en Jensen Beach, fue condenado por el juez del tribunal de distrito de Estados Unidos, Paul C. Huck, a 120 meses de prisión, tras haber sido declarado culpable por un jurado del “intento de seducción en línea de una menor”, apunta este lunes un comunicado de la fiscalía federal del Distrito Sur, en la página oficial del Departamento de Justicia de Estados Unidos.

Spiegel en enero de este año se comunicó en línea y por mensajes de texto con una persona que él creía que era una niña de 14 años llamada Shayla, pero en realidad era un personaje ficticio creado por un chico de 16 años para identificar a depredadores de menores en la zona y prevenir abusos sexuales contra niños y niñas.

A principios de ese mes, Spiegel intentó convencer a “Shayla” de que se reuniera con él en el estacionamiento de un centro comercial en la ciudad de Fort Pierce, en el condado de Santa Lucía, para mantener relaciones sexuales en su coche, además de enviarle descripciones gráficas de los actos sexuales que realizaría con ella, así como fotos de su pene erecto.

Pero después de pactar todo, Spiegel no llegó a la hora de la cita porque agentes del tránsito lo detuvieron por exceso de velocidad y decidió volver a casa.

No obstante, el joven creador de “Shayla” se puso en contacto con las fuerzas del orden, ya que Spiegel siguió comunicándose con comentarios sexualmente explícitos, además de continuar enviando fotos de su cara y pene, e insistiendo en conocer a la niña en persona.

Esta denuncia abrió una investigación contra el presunto depredador sexual, a quien para finales de enero las autoridades le encontraron en su casa, tras ejecutar una orden de registro, el teléfono móvil que había utilizado para comunicarse con "Shayla".

La nota explica que este caso se presentó bajo el Proyecto Infancia Segura, una iniciativa nacional para combatir la creciente epidemia de explotación y abuso sexual de menores, que fuera establecida en mayo de 2006 por el Departamento de Justicia.

Este proyecto está dirigido por las fiscalías de los Estados Unidos y la Sección de Explotación y Obscenidad Infantil (CEOS) de la División Penal para reunir recursos federales, estatales y locales para localizar, detener y procesar a los individuos que explotan a niños a través de Internet, así como para identificar y rescatar a víctimas de abusos.

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