Desde el pasado estallido social del 11 de julio de 2021, el Observatorio Cubano de Conflictos (OCC) ha registrado 3,266 protestas en Cuba, de las cuales 1, 713 ocurrieron en el primer semestre de 2022.
Este mes de julio, por su parte, OCC documentó un total de 263 protestas durante julio en Cuba.
Las protestas ocurrieron en las 15 provincias y el municipio especial Isla de la Juventud, para un promedio, al igual que el mes pasado, de 8 demostraciones públicas diarias, según precisa el último informe de esta organización, publicado este lunes.
Como aspecto significativo de julio, OCC explica que los cortes de electricidad motivaron 47 protestas de diferentes modalidades en la Isla.
Destacan que las 47 protestas motivadas por apagones en julio superan a las 39 en junio y las 28 ocurridas en mayo por el mismo motivo.
Además, precisan que 20 de estas protestas se produjeron en forma de cacerolazos callejeros que en Cuba se producen de manera distinta al resto del continente.
“Los 20 cacerolazos ocurridos en 12 provincias en el mes de julio se realizaron retomando las calles en la noche que por el día controlaban las fuerzas represivas y desfilando en ellas, amparados por la oscuridad, gritando consignas antigubernamentales”, detalla el informe.
La organización independiente añade que por tercera vez en un mes el número de protestas económicas y sociales (188) sobrepasaron a las motivadas por derechos políticos y civiles (75), lo cual constituye una tendencia.
OCC considera que el crecimiento de las protestas por motivos económicos y sociales está relacionado con los apagones, el colapso del sistema de salud ante la epidemia creciente de dengue, la escasez de alimentos y medicamentos, así como la inflación.
El análisis de esta organización de la sociedad civil cubana señala que en julio La Habana fue de nuevo la provincia con mayor concentración de protestas (79), seguida por Villa Clara (20), Camagüey (19) y Holguín (19).
Este informe considera también que el gobierno cubano está atravesando por una crisis de gobernabilidad y que la protestas han adquirido “la modalidad de múltiples rebeliones de magnitud diversa y por ahora geográficamente aisladas”.
“En el mes de julio de 2022, el gobierno desplegó todas sus fuerzas para evitar una réplica del 11J. Con ese fin recurrió de nuevo a la militarización del país, a los cortes de internet para impedir la visibilidad y posible expansión de cualquier rebelión local, a la intensificación de la represión policial y judicial, así como a continuar fomentando el éxodo masivo de ciudadanos”, se lee en el informe de OCC.
Durante el pasado junio, OCC registró 258 protestas en Cuba, de las cuales 83 fueron por derechos políticos y civiles (32%) y 175 por derechos económicos y sociales (68%).
En ese mes en la isla hubo, en promedio, más de ocho protestas diarias, lo que significó un crecimiento de dos protestas más en relación con mayo, cuando ocurrieron 185, para una media de seis por día.
Por segunda vez, en junio el número de protestas económicas y sociales (175) sobrepasaron a las motivadas por derechos políticos y civiles (83), apunta el informe.
Además, el mayor incremento ocurrió precisamente en las protestas por derechos económicos y sociales, para un crecimiento del 62%. Los 175 eventos registrados contrastan con los 108 vistos en mayo.
A principios de junio, el Observatorio Cubano de Derechos Humanos (OCDH) denunció que en mayo se registraron 477 acciones represivas en la isla.
Entre ellas destacan 111 detenciones arbitrarias y 144 sitios de viviendas de activistas y periodistas, además de hostigamientos, amenazas, juicios, citaciones, multas, agresiones físicas, expulsiones al exilio e impedimentos de viaje al exterior.
Asimismo, unas 116 personas sufrieron cortes en el servicio de internet para evitar denuncias de actos represivos y limitar la libertad de expresión, y más de una decena de activistas fueron impedidos de salir de sus domicilios cuando pretendían asistir al juicio de Luis Manuel Otero Alcántara y Maykel Osorbo, miembros del Movimiento San Isidro, durante los días 30 y 31 de mayo.
En abril, esta misma organización con sede en Madrid, documentó 293 protestas en las 15 provincias de Cuba y el municipio especial Isla de la Juventud.
De acuerdo con un comunicado emitido por ese organismo, en abril hubo un promedio de casi 10 incidentes diarios, un incremento de tres en relación con el mes de marzo (232 protestas).
La organización califica como protestas las pintadas en muros, cacerolazos callejeros, carteles, alocuciones en plazas públicas llamando a la rebelión, reparto de volantes impresos, distribución de información alternativa por bluetooth de los celulares usando la aplicación Zapya, protestas en las redes sociales y demandas colectivas por la liberación de presos políticos, entre otros métodos no violentos.
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