Del más de un centenar de contagios importados de dengue en España, cerca de la mitad corresponden a personas que viajaron, entre los meses de julio y agosto, a Cuba.
Esta circunstancia se debe, unido a la epidemia de dengue que padece la isla, al hecho de que, de los más de 120 países tropicales en los que esta enfermedad es endémica, Cuba es al que más españoles viajan, y del que más viajeros recibe España, explica un reporte del diario español La Razón.
“La percepción que tenemos los que estamos en los hospitales es que los casos importados están aumentando a niveles de 2019, e incluso de veranos anteriores. Deberían estar empezando a bajar por la tendencia de los viajes en España que, mayoritariamente, son entre julio y agosto, pero aún no lo están haciendo, ya que hay mucha gente que viaja en septiembre”, comenta al respeto Marta Díaz Menéndez, responsable de la Unidad de Patología Importada y Salud Internacional del Hospital Carlos III de Madrid.
La presencia autóctona del mosquito que transmite la enfermedad en las ciudades costeras españolas agrava el problema.
En Francia, cerca de la mitad de los 123 positivos detectados hasta finales de agosto procedían de Cuba, así como la mayoría de 216 turistas afectados en la Florida.
No es la primera vez que medios españoles reseñan la preocupación en el país europeo ante el aumento de casos importados de dengue desde Cuba.
A inicios de septiembre, un pormenorizado artículo sobre el tema, publicado por el diario El País, reseñaba con preocupación que los hospitales españoles habían detectado en las últimas semanas un fuerte incremento de casos de dengue en viajeros procedentes de Cuba.
En ese entonces, cerca de las dos terceras partes del más de centenar de diagnósticos de este verano en España procedía de la isla.
Solo en el Hospital Carlos III en las últimas dos semanas de agosto se reportaron 15 casos de dengue, de los que 13 habían viajado a Cuba.
También procedían de la isla la mayor parte de los 36 pacientes atendidos en toda la Comunidad de Madrid y nueve en Andalucía; la mitad de los 14 de la Comunidad Valenciana; seis de los ocho de Navarra; y los dos hospitalizados en Extremadura.
A mediados de septiembre, el gobierno de la isla confirmó la transmisión del virus del dengue en todas las provincias cubanas, de las cuales Santiago de Cuba, La Habana, Guantánamo, Las Tunas, Matanzas y Mayabeque, y el municipio especial Isla de la Juventud, presentan mayor tasa de incidencia de casos sospechosos.
Este último lunes, el Ministerio de Salud Pública advirtió que el riesgo de enfermar de dengue en Cuba es alto debido al aumento de los índices de infestación del mosquito Aedes aegypti en todo el país.
La alerta llega en la antesala de octubre y noviembre, cuando se acelera el período reproductivo del agente transmisor del arbovirus y podría ocurrir un significativo aumento de casos de dengue en el país y complicaciones derivadas de la enfermedad, en un escenario marcado por el colapso del sistema de salud y la falta de medicamentos y recursos.
Esta semana, se reportó la muerte a causa del dengue de dos niñas cubanas en el municipio Guisa, en la provincia de Granma.
A pocos kilómetros de Guisa, en el municipio de Contramaestre, perteneciente a la provincia de Santiago de Cuba, la niña Arlín Sailet Acuña Espinosa falleció a mediados de julio víctima de dengue hemorrágico.
Por esos días, dos pequeñas más, Kenia Orosco y Paola Patricia Rodríguez, murieron por la misma causa en el municipio Guanabacoa, en La Habana, y en la provincia de Cienfuegos, respectivamente.
Otras víctimas de lo que puede considerarse ya una epidemia han sido los profesionales de la salud. A principios de mes, trascendió la muerte de la ginecobstetra Yeliezer González y la epidemióloga Liana Delgado, ambas en Matanzas.
La semana pasada falleció, también por dengue, la enfermera Nelly Sánchez Espinosa, quien laboraba en el Hospital Materno de Cabaiguán, en Sancti Spíritus.
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