El Papa Francisco pidió a Vladimir Putin que detenga la guerra en Ucrania y al presidente Volodimir Zelensky que se abra a recibir propuestas de paz.
"Mi llamamiento se dirige ante todo al Presidente de la Federación Rusa, rogándole que detenga, también por amor a su pueblo, esta espiral de violencia y muerte. Por otro lado, entristecido por el inmenso sufrimiento de la población ucraniana tras la agresión sufrida, dirijo un llamamiento igualmente confiado al Presidente de Ucrania para que esté abierto a propuestas de paz serias", expresó Francisco en el Ángelus este domingo.
"¿Qué más tiene que pasar? ¿Cuánta sangre debe correr aún para que entendamos que la guerra nunca es una solución, sino solo destrucción? En nombre de Dios y en nombre del sentido de humanidad que habita en cada corazón, renuevo mi llamamiento para que se llegue inmediatamente a un alto el fuego", se preguntó.
Francisco se mostró preocupado por la amenaza nuclear que han hecho los rusos cuando subrayaron la semana pasada que si la integridad territorial de su país se ve amenazada, no dudará en utilizar todos los medios disponibles para protegerlo el país.
Alertó que la escalada militar del conflicto en Ucrania puede destruir el planeta y dijo que deplora la grave situación que se ha creado en los últimos días con lo que considera "nuevas acciones contrarias a los principios del derecho internacional".
"Aumenta el riesgo de una escalada nuclear, hasta el punto que hacen temer consecuencias incontrolables y catastróficas a nivel mundial", dijo el líder católico.
Este es el enésimo llamamiento del Papa a la detención de la guerra. También pidió a los líderes de la comunidad internacional que “busquen negociaciones capaces de conducir a soluciones no impuestas por la fuerza, sino consensuadas, justas y estables”.
"¡Por favor, que las generaciones más jóvenes respiren el aire saludable de la paz, no el aire contaminado de la guerra, que es una locura! Tras de siete meses de hostilidades, se recurra a todas las herramientas diplomáticas, incluso las que hasta ahora no se han utilizado, para poner fin a esta terrible tragedia. ¡La guerra en sí misma es un error y un horror!", concluyó.
En mayo Francisco denunció que la ciudad de Mariúpol fue destrozada y también en ese momento reiteró su llamado a la paz. Calificó la guerra en Ucrania como una "macabra regresión de la humanidad" y confesó que la situación lo hace "sufrir y llorar".
En esa ocasión pidió que los corredores humanitarios se activaran para evacuar a las personas atrapadas en la acería de Mariúpol y criticó implícitamente la violencia del gobierno de Rusia.
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