El escultor Luis Felipe Franco Laffite, residente en Jagüey Grande, Matanzas, lamentó el panorama desolador que la crisis migratoria está dejando en Cuba.
"No se acabó. Aquí quedaremos unos cuantos viejos a esperar la muerte y una cúpula de millonarios que no les importa lo que pasa en Cuba", dijo Franco en Facebook este martes.
El artista matancero explicó que sentía la necesidad de desahogarse tras vivir una dura escena en un aeropuerto, donde madres dejaban a sus hijos entre llantos, sin saber cuándo volverán a verlos.
"Sufrí una desgarradora y amarga experiencia en el Aeropuerto de Santa Clara al ver tanto sufrimiento de familiares despidiéndose de los suyos, imágenes de niños y mujeres llorando a más no poder despidiéndose antes de entrar al recinto. Esto parte el alma", comentó Franco.
El escultor recientemente comprobó que algunos de sus amigos cercanos también dejaron el país de modo ilegal, por mar, aventurándose a lo desconocido y sin certezas de que llegarían vivos a la otra orilla.
"Las fotos de amigos cercanos en altamar también son un hecho de desesperanza. Llegaron, sí, llegaron y están bien contentos de lograr el objetivo, pero... ¿Y los que se quedaron qué?", se preguntó.
Franco asegura que "parte el corazón en cuatro pedazos que las personas tengan que sacrificarse tanto en busca de un mundo mejor o al menos donde la vida sea un poco más llevadera".
Este verano el escultor de 68 años tuvo que salir a las calles a vender aguacates mientras espera su jubilación. Hubo quienes bromearon sobre su oficio temporal, pero él solo les respondió: "no saben lo que dicen (...) Necesito ganarme unos menudos para mantener a mi familia", porque la pensión no alcanzará.
Las malas políticas del Estado han dejado en el país una gran inflación, crisis económica, escasez de alimentos, serios problemas de sanidad, epidemias y muertes por falta de medicamentos.
En medio de este desesperanzador panorama, el Estado reacciona con violencia ante las protestas y manifestaciones de descontento y encarcela o sanciona a toda persona que levante su voz con críticas al gobierno. El aumento de la represión y la miseria empujan a los cubanos a emigrar.
En el recién concluido año fiscal 2022 ingresaron en territorio de Estados Unidos al menos 224,607 cubanos que solicitaron refugio político, según indican los datos oficiales del Departamento de Aduanas y Protección de Fronteras. Solo en septiembre procesaron 26,742 solicitudes.
Se trata de la mayor crisis migratoria que ha vivido el pueblo de Cuba. Las personas abandonan la isla por avión hacia países como Nicaragua e inician largas y peligrosas rutas migratorias cruzando fronteras de Latinoamérica. También emigran por mar, en embarcaciones precarias, poniendo en peligro sus vidas y con altas probabilidades de ser deportados.
La semana pasada el gobierno cubano informó que habían sido repatriados a Cuba en lo que va de 2022 unas 7,770 personas. De ellas más de 5,600 son balseros cubanos detenidos en las costas de Estados Unidos.
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